El comité CALAMASUR, integrado por representantes de los sectores artesanales, industriales y de procesamiento del calamar gigante de Chile, México, Perú y Ecuador, expresó su profunda preocupación por la "deuda pendiente" que la Organización Regional de Ordenación Pesquera del Pacífico Sur mantiene en la gestión de la jibia.

Mediante una severa Declaración de Posición emitida tras la 13ª Reunión de la SPRFMO, celebrada en Chile entre el 17 y 21 de febrero, el organismo regional señaló el estancamiento en la administración de este recurso, especialmente si se compara con el exitoso manejo de la pesquería del jurel.

Avances reconocidos durante la reunión internacional

A pesar de las críticas, desde CALAMASUR reconocieron logros significativos, como la recepción del informe de la Segunda Evaluación de Desempeño, que permitió adoptar mecanismos de mejora en la gestión de la SPRFMO, y la elección del nuevo Secretario Ejecutivo, cargo que estuvo vacante por un periodo prolongado.

Asimismo, celebraron la aprobación de las medidas propuestas por Perú y la creación del Fondo para la Interpretación al Español, que fortalecerá la participación de los países costeros hispanohablantes y la integración de los pescadores artesanales en la gobernanza de la Comisión.

Sin embargo, las preocupaciones superan estos avances. CALAMASUR subrayó que el enfoque precautorio que inspiró la CMM 18-2024 para la gestión de la jibia resulta insuficiente sin el respaldo de ciencia rigurosa. "La dilación en resolver cuestiones críticas, como la atención a los requerimientos de datos solicitados por el Comité Científico, compromete la eficacia y la reputación de la SPRFMO", manifestaron en su comunicado.

Exigencias concretas de países latinoamericanos

En su declaración, solicitaron al organismo internacional "poner el pie en el acelerador" en la gestión del calamar gigante, enfatizando la urgencia de abordar las lagunas existentes en la evaluación de trasbordos, aspecto considerado crítico para lograr un manejo robusto y sustentable.

"Confiamos en que la Comisión capitalizará las experiencias pasadas y eliminará los obstáculos identificados, trabajando en conjunto con los miembros, colaboradores y organismos observadores para asegurar un manejo basado en ciencia", expresó Manuel Martínez, asesor técnico para Chile de CALAMASUR.

Por su parte, Hernán Cortés, vocero de la Alianza Nacional por la Defensa de la Pesca Artesanal, destacó el impacto positivo que tuvo en Chile la llamada Ley de la Jibia, que eliminó la pesca por arrastre, permitiendo su recuperación y marcando un récord de exportaciones en 2024, con notables beneficios para la pesca artesanal y las PYMES pesqueras.

Contexto histórico y económico de la jibia

La gestión de la jibia en Chile cambió desde la prohibición de la pesca de arrastre en 2018. Esta reforma, impulsada por el entonces diputado Daniel Núñez (PC), no solo priorizó el uso de poteras —aparejos selectivos con menor impacto ecológico— sino que transfirió el 80% de la cuota a pescadores artesanales.

Actualmente, Chile exporta aproximadamente 40 mil toneladas anuales, principalmente a España, Japón y Corea del Sur. Sin embargo, persisten tensiones: una propuesta legislativa impulsada por el senador Gastón Saavedra busca reintroducir el arrastre de media agua, argumentando que generaría 1.700 empleos en plantas procesadoras, mientras críticos advierten que esta técnica podría comprometer los avances logrados en sostenibilidad y distribución equitativa del recurso.

Evolución positiva de la jibia tras regulaciones

El senador Daniel Núñez (PC) aseguró a El Desconcierto, durante la primera jornada de SPRFMO, que "en el caso de la jibia tenemos una situación que es muy importante, la especie pasó de estar sobre explotada a plena explotación, o sea hay una recuperación importante".

Según el parlamentario, actualmente la jibia es "la principal pesquería que sostiene a la pesca artesanal de todo Chile. Hay caletas ya desde Atacama hasta Puerto Montt que están viviendo casi de la jibia y eso ha permitido que haya además una actividad de alianza con las pymes para el procesamiento".

Núñez también destacó que "se batió en el año 2024 el récord de exportaciones de jibia, y eso muestra que es posible tener esta asociación entre la pesca artesanal, las pymes pesqueras, y también su captura con un método sustentable como es la potera o la línea de mano".

Finalmente, el senador resaltó que países como Perú avanzaron en una dirección similar al implementar la prohibición del arrastre para la jibia, demostrando que "estamos en un buen camino con estas medidas de explotación que son sustentables para la especie".