Cada 22 de marzo se celebra el Día del agua y aunque la gran parte del consumo hídrico en Chile no es en los hogares sino en actividades industriales como la agricultura o la industria forestal, la mega sequía que atraviesa el país y las proyecciones de menos agua en el futuro hacen que cada gota cuente.

En los últimos años se han popularizado en el país algunas soluciones tecnológicas para usar en las casas y ahorrar agua, no solo beneficiando la situación del país sino reduciendo el gasto familiar.

Uno de los métodos más usados son dispositivos que agregan aire en las griferías del hogar, para aumentar la presión usando menos agua. Aunque los más populares son los cabezales de ducha con aire, gobiernos regionales del país han hecho campañas de instalación de dispositivos con aire para lavaplatos, lavamanos y ducha. Estos permiten reducir hasta 50% o 60% el uso de agua.

Otra forma de ahorrar agua en la casa, que requiere de una inversión inicial, es instalar un lavavajillas. Con el avance de la tecnología, estas máquinas se han diseñado para ser cada vez más eficientes en el uso de agua, y usan sensores para detectar qué tan turbia está el agua de un lavado antes de agregar más.

El uso del lavavajillas puede ahorrar hasta 80% de agua si se lo compara con el gasto de lavar los platos a mano. Otra innovación que se usa cada vez más en hogares de Chile es el detergente en láminas.

Esta solución surgió buscando una fórmula más eficiente para el detergente, ya que los que vienen en formato líquido están compuestos en 80% de agua, mientras que las láminas que se venden en Chile casi no tienen agua en su composición, sino que se mezclan directamente con el agua del lavado.