En la ceremonia de cierre del proceso constitucional, el Presidente Gabriel Boric abordó en su discurso los posibles escenarios pos plebiscito aclarando la posición del gobierno.

“En el caso de que la propuesta que nos entregan de nueva Constitución sea aprobada, no les quepa duda que, como gobierno, cumpliremos íntegramente con su correcta implementación e instalación (…) En cambio, si esta propuesta es rechazada, nuestro gobierno se dedicará sin pausa y con mucha energía a seguir trabajando y gobernando por el bienestar de las personas”, afirmó el mandatario.

Tres escenarios

Se trata de un escenario político que no es una preocupación exclusiva del jefe de Estado. Personeros políticos y expertos ya proyectan el panorama político posterior al trascendental plebiscito de salida del 17 de diciembre.

Expertos consultados por El Desconcierto apuntan a los factores clave a los que se debe prestar atención una vez concluida la discusión constitucional: la posición del gobierno, el éxito o fracaso de Republicanos y la reconfiguración del mapa político.

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Aire para el gobierno

Para Rodolfo Disi, cientista político del Departamento de Estudios Políticos de la Universidad de Santiago, el gobierno “no saldrá bien parado” del plebiscito independiente del resultado.

“Claramente es mejor para el gobierno si gana el ‘En Contra’, pero de todas formas no ganará mucho apoyo para hacer los cambios más profundos que quisiera hacer. Si se rechaza el proyecto, eso sería más por sus falencias que por méritos del gobierno o de los partidos que han sido minoría en el Consejo Constitucional”, apunta Disi.

Gonzalo Espinoza Bianchini, académico de la Facultad de Ciencias Sociales e Historia de la Universidad Diego Portales (UDP), asegura que en caso de que fracase la propuesta constitucional de las derechas se abre una puerta para que el Ejecutivo tome “un segundo aire”.

“Si gana el ‘En contra’ por un buen margen, el Partido Republicano y los partidos de derecha que apoyaron el “A favor” quedarán dañados. Eso puede llevar a que el gobierno tenga un segundo aire y trate de negociar nuevamente las leyes que tiene estancadas en el congreso”, explica el académico.

Derrota al plan de la derecha

El Partido Republicano, Chile Vamos, Amarillos y Demócratas son sin duda las fuerzas políticas que más se juegan su capital en este plebiscito, dicen los expertos.

“La derecha, tanto la más tradicional como el Partido Republicano, han invertido harto esfuerzo y buena parte de su reputación en el proyecto. Si gana el ‘En contra’, sería en buena medida por una mala evaluación del trabajo que han hecho sobre todos los Republicanos en el Consejo, dado que han liderado el proceso. En el largo plazo, cualquiera de las dos opciones es buena para el sector (en el peor de los casos se mantiene el status quo constitucional) pero en el corto y mediana plazo podría tener consecuencias electorales negativas”, explica Disi.

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Espinoza, en tanto, sostiene que a pesar de que un eventual fracaso constitucional “debilitaría” a las derechas, “Kast y Matthei seguirán probablemente siendo los cabecillas. Además, es probable que la agenda pase rápido hacia lo que ocurrirá si gana el ‘En contra’”.

Respecto a la reconfiguración del mapa político, Disi sostiene que las coaliciones levantadas en torno al ‘A favor’ y ‘En contra’ son “contingentes” y que es probable que “se desarmen luego del plebiscito”.

En todo caso, el académico de la USACH advierte: “Si la figura de Kast se mantiene fuerte o se recupera, podría ser que está configuración se sostenga más en el tiempo”.

Polarización

La polarización en el Congreso también es otro elemento a observar en el escenario político actual, factor que se podría exacerbar en caso de un. Resultado estrecho, dicen los expertos.

“Un resultado estrecho puede llevar a radicalizar más los discursos. Si gana por margen importante el “En contra” puede ayudar a relajar el ambiente. Si gana por margen importante el “A favor”, el gobierno estaría ya prácticamente sepultado, porque la oposición no la dejará hacer nada. De igual forma, la polarización es algo más de la élite que de la ciudadanía”, dice Espinoza.

Disi, por su parte, hace hincapié en que la polarización “se percibe es más a nivel de representantes, partidos y élites que de la ciudadanía, donde yo diría que la sensación es más de desafección política”.

Eso sí, el académico apunta a que “si gana el ‘En contra’, la polarización se va a profundizar porque demuestra que la clase dirigente no es capaz de ponerse de acuerdo para dar soluciones”.