A eso de las 11 de la mañana, Gustavo Gatica baja de un auto tomado del brazo de su polola. Lleva puesta una polera del Negro Matapacos con la frase “en la calle más vivo que nunca”. Unos pasos atrás, le sigue el cineasta Hernán Caffiero y su equipo de trabajo, quienes documentan el encuentro en la comuna de Pudahuel. Al otro lado, los esperan los familiares de Jorge “Neco” Mora. Se saludan afectuosamente y entran a la casa.

Los familiares de Mora visten mascarillas y poleras con la consigna #JusticiaParaNeco. El interior de la casa parece una especie de santuario. Hay imágenes grandes con el rostro alegre del hincha colocolino. “A nombre de mis papás, hermanos, hermanas y sobrinos, te agradecemos por venir y por considerar estar aquí hoy. Las puertas de nuestra casa siempre estarán abiertas para tí y toda tu familia”, le dijo Nataly Mora, hermana menor del "Neco", a Gustavo Gatica. 

“Creo que es importante que nos apoyemos entre nosotros. Sobre todo a los que nos ha tocado vivir casos difíciles (...) Gracias por abrirme las puertas de su casa”, respondió Gatica, quien perdió la visión de ambos ojos el 8 de noviembre de 2019, producto de los perdigones que habrían sido disparados por el ex oficial de Carabineros, Claudio Crespo, quien actualmente está en prisión preventiva, formalizado por apremios ilegítimos con resultado de lesiones gravísimas. 

Jorge Mora, padre, socio activo del Club Social y Deportivo de Colo Colo, amigo de todos e incansable luchador social -cuentan sus familiares-, murió un 28 de enero, fuera del estadio del club de sus amores. Durante la conversación entre Gustavo Gatica y la familia, además de recordarlo, reflexionan sobre el estallido social, las experiencias vividas, y sobre los numerosos casos donde aún no se identifican culpables, cuyas causas judiciales poco avanzan.

Es el caso del “Neco”, cuya audiencia de preparación de juicio oral ha sido confirmada para marzo, más de un año después de los hechos que le costaron la vida.  "Nuestro abogado, Rodrigo Román, nos dijo que igual es para largo, que no pensáramos que en la primera audiencia iba a tener al culpable tras las rejas, sino que era un proceso largo”. Gatica y la familia Mora coinciden en que existe una problemática generalizada que busca estigmatizar a las víctimas.

“Desde el momento en que el presidente nos declara la guerra, hay una connotación de clases. Y se ocupa la vieja táctica -que ocupaban los fascistas antiguamente- sobre el enemigo interno que intentaba desestabilizar el orden, y al mirar, (te das cuenta que) eran hijos e hijas del pueblo, nada más que eso. Entonces se hace doblemente pantanoso el proceso, doblemente frustrante porque, (...) ahora, ad portas de una nueva Constitución, con todo lo que eso implica, ¿es posible construir una sociedad nueva, justa, sin memoria?, ¿sin justicia?, ¿sin reparación?, ¿sin libertad de nuestros presos?, ¿realmente es posible?”, señala Juan Roco, vocero de la Coordinadora Justicia Para Neco.

La familia de Mora comenta que realizará una marcha conmemorativa este jueves, tomando en cuenta que el aniversario de muerte de Jorge Mora, es muy cercano a la de Ariel Moreno, el joven colocolino que tres días después de la muerte de Mora, recibió un impacto de bala en su cabeza con resultado de muerte (1 de febrero), cuando protestaba por la muerte del “Neco” en Maipú. 

Hacia el final de la conversación, Gustavo Gatica le hace entrega de un presente a la familia: una camiseta conmemorativa de Colo Colo con el número 216 -cantidad de goles con que el artillero se consagró como el mayor goleador del fútbol chileno-, autografiada por el mismo Esteban Paredes. 

“Creo que es importante levantar este caso y el de todos quienes fueron asesinados durante la revuelta popular. Hay que recordarlos y hacer justicia, y para que se haga justicia, hay que hacer presión social”, agrega Gustavo Gatica, de pie frente a un extenso mural con el rostro del “Neco”, frente a la casa de su familia. 

Para Hernán Caffiero, cineasta, a cargo del proyecto documental a partir de las historias del estallido social, y ganador del premio Emmy Internacional 2018 por “Una historia necesaria”, serie-documental que retrata historias sobre detenidos y desaparecidos políticos durante la dictadura militar, “tanto el Neco como Gustavo, cabros jóvenes, luchadores sociales, de alguna forma encarnan el sentir de una nación aislada. La familia de Neco y Gustavo justamente proyectan eso: dignidad. Creo que eso es un elemento clave a la hora de entender lo que significan para el pueblo chileno”.