Una abogada de Arica demandó al Club Deportivo San Marcos de Arica por no pagarle los $417.977.631 que, según ella, se habían acordado como honorarios por representarlos en varias causas legales.

Según se puede apreciar en el fallo judicial, la abogada afirmó que el club había prometido pagarle un 20% de lo defendido en cada juicio, además de un pago mensual fijo por su asesoría.

Sin embargo, el club aseguró que solo se había acordado el pago mensual de $600.000 y que no debía el dinero que ella reclamaba.

El conflicto surgió luego de que la abogada representara al club en casos tributarios, laborales y de policía local, logrando resultados favorables en algunos de ellos.

A pesar de eso, cuando pidió el pago de sus honorarios, el club le ofreció menos de lo que ella consideraba justo, argumentando que no existían acuerdos por escrito que respaldaran su versión.

Tras no llegar a un acuerdo, la abogada llevó el caso a la justicia. En el primer juicio, un tribunal decidió que el club debía pagarle $3.400.000, una cantidad mucho menor a la que ella pedía.

Luego, la Corte de Apelaciones revisó el caso y aumentó el monto a $3.900.000.

Sin estar conforme, la abogada llevó el caso a la Corte Suprema, esperando que revisaran nuevamente las pruebas y se le pagara todo lo que ella reclamaba.

La Corte Suprema, sin embargo, rechazó su petición. En su decisión, los jueces explicaron que los acuerdos verbales que mencionaba la abogada no estaban suficientemente respaldados por las pruebas presentadas, como correos electrónicos y mensajes de WhatsApp.

También señalaron que los tribunales anteriores habían evaluado correctamente las pruebas y tomado una decisión adecuada.

Con esto, se confirmó que el club solo debía pagar la cantidad establecida previamente.