¿Pudieron los bombardeos a La Moneda generar un "pulso sísmico en la ciudad"?
Un registro de la actividad sísmica percibida el 11 de septiembre de 1973 es parte de los hallazgos realizados por Sergio León Ríos, graduado del Departamento de Geofísica (DGF) de la Universidad de Chile e investigador del Advanced Mining Technology Center (AMTC).
El sismólogo encontró los sismogramas que revelan el pulso sísmico de Santiago el día del golpe de Estado mientras revisaba documentos antiguos en las bodegas del DGF para una iniciativa de rescate patrimonial, junto al docente de la Universidad de Chile, Raúl Madariaga.
“Dimos con un paquete que decía ‘Santiago 1973’. Nos sorprendimos y, obviamente, lo abrimos para ver qué se podía encontrar. Lo que descubrimos, entonces, fue montón de registros de una estación sismológica ubicada en Santiago”, relata Sergio León Ríos.
[Te puede interesar] Más de 2 mil árboles ya crecen a lo largo del país en honor a detenidos desaparecidos
Al ser consultado por la actividad sísmica de este 11 de septiembre de hace 50 años, el profesional plantea que la información mostrada por las trazas aún no es concluyente. “Se ven algunas señales anómalas, pero no hay certeza suficiente como para relacionarlas con el bombardeo a La Moneda. En general, podría decirse que esto queda escondido con el ruido de la ciudad”, explica.
Valor patrimonial
Consultado acerca de la importancia de este hallazgo, el sismólogo de la Universidad de Chile indica que estos sismogramas tienen “un valor histórico incalculable, porque visibilizan los registros que hasta hoy estaban guardados en bodegas”.
En este sentido, agrega que “para un sismólogo y científico, como es mi caso, ver cómo las trazas pueden relatar la historia es algo que emociona.
[Te puede interesar] CIDH investigará a Carabineros por desaparición de joven esquizofrénico de Alto Hospicio
Además, justo ahora que se cumplen 50 años del golpe de Estado, acceder a documentos como estos permite hacer un ejercicio de memoria y aportar, desde otra vereda y con otra mirada, más antecedentes a este período gris de nuestra historia”, asegura.
En estos días, los sismogramas de septiembre de 1973 se encuentran en proceso de digitalización y respaldo, con tres objetivos. El primero es lograr su resguardo en un archivo digital de la biblioteca F. Montessus de Ballore, del Departamento de Geofísica de la Universidad de Chile, para lo cual cuenta con el apoyo inicial de la bibliotecaria, Marcela Pérez.
El segundo, servir como fuente de información para un eventual artículo que rescate el valor sismológico e histórico de los sismogramas encontrados. El tercero, apuntaría a la divulgación científica.