La abogada y magíster en derecho ambiental, Camila Musante, es reconocida por el patrocinio de causas emblemáticas, tales como el cumplimiento de la sentencia del Segundo Tribunal Ambiental por parte del Consorcio de Santa Marta.

En la misma provincia, la abogada patrocinó un recurso por contaminación de las aguas en la comuna de Padre Hurtado, un Recurso de Invalidación contra una Resolución de Calificación Ambiental de Planta de Tratamiento de Aguas Servidas San Isidro, en Isla de Maipo y un recurso de protección a favor de los vecinos del camino El Oliveto, en Talagante.

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Es integrante de la Asociación de Abogadas Feministas (Abofem) y va como independiente por un cupo de Comunes, dentro de la lista de Apruebo Dignidad. Profundiza en las propuestas ambientales que busca llevar al Congreso en esta entrevista con El Desconcierto.

-Durante estos meses de campaña, y con la experiencia en el territorio, ¿qué proyectos identificas en las provincias del Distrito?

Hay numerosos proyectos de impacto ambiental.  En la provincia del Maipo, por ejemplo,

he solicitado la apertura de participación ambiental ciudadana, como en el caso del Centro de Almacenamiento de datos ODATA que se emplazará en la comuna de San Bernardo. Mientras que, en la provincia de Melipilla, he venido trabajando por la apertura de espacios institucionales a la comunidad para la solución conjunta de problemas. Para esto he solicitado en diversos Municipios la creación de Mesas sociales por el agua. Estamos muy contentos porque una de ellas fue aprobada por la Alcaldía Ciudadana de Melipilla.

-En materia de descentralización, ¿cómo visualizas estas propuestas?

Sin duda que esta es una oportunidad para llegar con nuevas propuestas al Congreso, profundizar el proceso de descentralización que hoy es un fenómeno irreversible. Desde los territorios se demanda mayor autonomía, recursos y atribuciones para avanzar hacia un nuevo modelo de desarrollo y eso es lo que queremos hacer una realidad.

-Justicia ambiental es uno de tus principales ejes, ¿en qué consiste? ¿qué enfoque planteas?

La justicia ambiental debe ser una de las principales banderas para enfrentar al extractivismo que enferma a nuestra tierra. Debemos entender el cuidado y protección de la naturaleza como una tarea colectiva, reconociendo el derecho participativo de ciudadanas y ciudadanos en la toma de decisiones ambientales, así como también asegurar el derecho a acceder a la información ambiental. La participación, así como el acceso a la información, colateralmente traen como efecto positivo la educación ambiental de la sociedad, la que es necesaria para estimular cambios de hábitos que permitan disminuir las huellas ambientales. Es indispensable construir un proyecto que supere las lógicas del extractivismo neoliberal y permita fortalecer el crecimiento de los territorios desde la sustentabilidad y respetando el “buen vivir” de sus comunidades.

-¿Cómo avanzar hacia un modelo de desarrollo sustentable?

Primero, teniendo claro que no hay vida, sin naturaleza. El actual modelo de desarrollo de Chile el fiel reflejo de una cosmovisión que ve a la naturaleza como un bien que reporta beneficios económicos. Este es el mismo modelo que está poniendo en riesgo nuestra salud y nuestra vida, al situar al ser humano (y su crecimiento económico) en el centro de toda regulación, sin comprender que éste forma parte de una red muchísimo más grande y compleja, llamada naturaleza. Una red indivisible de elementos vivos y no vivos que permiten y sostienen la vida de todas, todos y todes, en este planeta. La naturaleza sostiene nuestras propias vidas, si no lo protegemos debidamente, no habrá derechos humanos que ejercer.

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-¿Qué te diferencia de otras candidaturas?

Que es una propuesta con una perspectiva feminista, ecologista y que no queremos más candidaturas de marketing. Es por eso que necesitamos trabajo que de garantía a la gente de que no son promesas vacías. Estoy convencida de que para la ciudadanía serán determinantes las propuestas y el trabajo territorial y social a la hora de votar. Desde esta candidatura, vamos por los hechos, no palabras.