Toda la incertidumbre sobre el futuro de la minera Dominga pasará ahora a manos del Primer Tribunal Ambiental de Antofagasta, que dictará su sentencia el próximo 30 de marzo. Como ya es conocido, el recién pasado miércoles el gobierno anunció que no participaría del proceso de conciliación que tenía como propósito llegar a un acuerdo con los representantes del proyecto, y que esperará por un fallo de ese tribunal.

La movida del gobierno fue inteligente y, gracias a ella, evitó enfrentar un escenario que era evidentemente complicado: se trata del proyecto de Andes Iron, propiedad de Carlos Alberto Délano (el mismo que estuvo detenido por el caso Penta y quien es íntimo amigo de Sebastián Piñera), y por este proyecto, Pablo Wagner, ex subsecretario de Minería de la primera administración de Piñera, fue formalizado por cohecho precisamente por haber recibido pagos de Penta por asesorías relacionadas con Dominga mientras estaba en el cargo.

Luego de que la iniciativa fuera rechazada por las instancias ambientales correspondientes por el gran impacto sobre reservas de pingüinos de Humboldt y otras especies, y que la empresa apelara a las sentencias, la idea de hacer una conciliación sorprendió a todos. Por primera vez un tribunal ambiental recurrió al mecanismo de llegar acuerdo cuando lo que se discute es la legalidad o ilegalidad de actos administrativos.

La idea fue del juez Daniel Guevara, presidente del Primer Tribunal Ambiental de Antofagasta, y por eso, el ex militante DC y RN aparece como uno de los mayores afectados. Sin embargo, no es el único que ve la movida como un revés.

En entrevista con El Mercurio en febrero pasado, Guevara contó que la idea surgió en 2017 en un seminario organizado por Valor Minero y ese diario. La alianza Valor Minero es un organismo público-privado cuyo presidente es Álvaro García, ex ministro de Segegob de Ricardo Lagos, quien ha realizado un intenso lobby por instalar la conciliación como mecanismo de resolución de conflictos ambientales. El ex PPD además, en 2017 fue explícito con respecto a Dominga y lamentó el rechazo y el descenso de la inversión minera en el país.

La iniciativa de García va en línea con el discurso de José Ramón Valente, ministro de Economía, quien previo a su llegada a la cartera ya anunció que su enfoque estará en promover una agenda de crecimiento y agilizar la institucionalidad relacionada con la aprobación de proyectos.

Sin embargo, por otra parte, la idea de realizar una conciliación fue ampliamente criticada por organizaciones medioambientales como Oceana Chile, quienes señalan que el proyecto las deja fuera de la discusión al solo considerar como partes intervinientes al Estado y los representantes de la iniciativa.