El mismo día que la Presidenta Bachelet hizo un simbólico toque de campana en la Bolsa de Comercio de Santiago para promover la igualdad de género en el ámbito de las empresas, la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, aliada feminista de la Fundación Heinrich Böll fue reprimida violentamente en una manifestación pacífica en contra la preocupante ola de femicidios.

En los últimos 7 días 7 mujeres fueron víctimas de femicidios, es decir, de asesinatos basados en motivaciones sexistas. Debido a esta situación, las activistas feministas salieron a la calle frente al Palacio del gobierno para declarar una alerta de género y exigir que se tomen medidas políticas para frenar la ola de femicidios. A la vez, denunciaron la complicidad de la prensa convencional –especialmente del diario “La Cuarta” - que sigue justificando femicidios como “crímenes pasionales”. Entre las manifestantes se encontraban mujeres embarazadas, madres con bebés y mujeres mayores de edad.

La periodista de la oficina regional Cono Sur de la Fundación Heinrich Böll, que se encontraba cubriendo el evento, fue testigo de la brutal represión y la intimidación a la prensa presente. (Las fotografías de la marcha fueron tomadas por la periodista de la Oficina Regional Cono Sur de la  Fundación Heinrich Böll).

12 personas (9 mujeres y 3 hombres) fueron detenidas temporalmente en la 3ª Comisaría de Santiago. Varias de las mujeres declararon haber sido víctimas de maltratos físicos, incluyendo violencia sexual.

Soledad Rojas, una de las coordinadoras de la Red Chilena contra la Violencia hacia las Mujeres, expresó su indignación por el uso de fuerza desmesurada en contra de mujeres pidiendo medidas de emergencia frente una situación de extrema violencia contra las mujeres. Según Rojas, este tipo de violencia policial en contra de feministas no es el resultado de unos actos individuales sino expresión de una sociedad neoliberal y sexista.

En Chile existe una preocupación prioritaria por proteger la propiedad privada mientras el ataque a la vida de una mujer no genera respuestas políticas inmediatas. Peor aún, una parte importante de los medios de comunicación al momento de informar actos de violencia hacia las mujeres los naturalicen, justifiquen o ridiculicen. De hecho, el canal de Televisión estatal, TVN, justifica la violencia al señalar que la marcha fue convocada por “anarquistas feministas”,falseando groseramente el tenor y carácter de la movilización.

Casi en paralelo, mientras la Jefa de Estado reafirmaba que “se requieren más mujeres que estén en primera línea, como protagonistas, participando en las grandes decisiones, tanto en el ámbito privado como en el ámbito público”, se reprimió brutalmente a mujeres activistas, que saliendo al espacio público, le piden a la misma presidenta medidas de emergencia frente una situación de extrema de violencia contra las mujeres.

Evidentemente un país que avala la represión de las mujeres está muy lejos de cumplir con los ideales invocados en el acto oficial de la Bolsa de Comercio en la mañana del mismo día. La valorización del trabajo de las mujeres parte por respetar sus derechos humanos esenciales.

Denunciamos la violencia institucionalizada a través de organismos policiales, que amparados en una noción errada del orden público, cercenan la libertad de expresión de las ciudadanas y ciudadanos reunidos frente al palacio de gobierno y exigimos que el slogan utilizado esta mañana por la presidenta -“Que la igualdad de género suene fuerte"- se aplique también a los derechos humanos y a la justicia.