Tras 15 meses de intensos enfrentamientos entre Israel y Hamás, que comenzaron en octubre de 2023, se alcanzó un alto el fuego en enero de 2025.

Este conflicto dejó más de 47.000 muertos y más de 110.000 heridos en la Franja de Gaza, según informes de las autoridades de Hamás.

Las zonas más afectadas incluyen el norte de Gaza y la ciudad de Khan Younis, donde la infraestructura quedó devastada.

Durante el conflicto, se registró un número récord de periodistas asesinados. Según el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), en 2024 murieron 124 periodistas en 18 países, siendo Israel responsable de más del 70% de estas muertes, con 85 periodistas fallecidos en Gaza.

Entre las víctimas, se destacan 82 palestinos, algunos de los cuales fueron asesinados deliberadamente.

La devastación en Gaza es inmensa, con barrios enteros reducidos a escombros y una crisis humanitaria sin precedentes.

La comunidad internacional ha expresado su preocupación por la situación, y se han iniciado debates sobre las propuestas para el futuro de la región y los esfuerzos de reconstrucción necesarios.

Propuestas controvertidas para el futuro de Gaza

Una de las propuestas más polémicas proviene del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien sugirió que Estados Unidos tome el control de la Franja de Gaza con el objetivo de transformarla en una "Riviera del Medio Oriente".

Este plan implicaría el desplazamiento permanente de más de 2 millones de palestinos que residen en la zona, lo que ha sido duramente criticado por organizaciones de derechos humanos y líderes palestinos, quienes lo consideran una forma de "limpieza étnica".

La comunidad internacional ha expresado su rechazo a esta iniciativa. La ONU ha señalado que cualquier desplazamiento forzado de población viola el derecho internacional y podría constituir un crimen de guerra.

Además, expertos advierten que este tipo de propuestas podrían aumentar la inestabilidad en la región.

El desafío de la reconstrucción

Paralelamente, la reconstrucción de Gaza se presenta como un desafío monumental. La ONU estima que se necesitarán más de 53.000 millones de dólares para restaurar la infraestructura y los servicios básicos en la Franja, devastada por más de un año de conflicto.

De este monto, más de 20.000 millones serían necesarios en los primeros tres años para abordar las necesidades más urgentes.

Sin embargo, la reconstrucción enfrenta obstáculos significativos. La persistente inestabilidad política, el bloqueo impuesto por Israel y Egipto, y las divisiones internas palestinas complican la llegada de ayuda y la implementación de proyectos de reconstrucción.

Además, sin un acuerdo de paz duradero, los donantes internacionales pueden mostrarse reacios a invertir en la reconstrucción, temiendo que sus esfuerzos sean en vano si el conflicto se reanuda.

Resistencia y esperanza entre los palestinos

Desde la entrada en vigor del alto el fuego en enero de 2025, la situación en la Franja de Gaza ha experimentado cambios significativos.

En las últimas semanas, se han llevado a cabo intercambios de rehenes y prisioneros entre Hamás e Israel, facilitados por mediadores internacionales como Egipto y Qatar.

Hamás ha liberado a varios rehenes israelíes, incluyendo a Sagui Dekel-Chen, Iair Horn y Alexander Trufanov, a cambio de la liberación de prisioneros palestinos por parte de Israel.

A pesar de estos avances, el alto el fuego ha enfrentado desafíos. Ambas partes se han acusado mutuamente de violar los términos del acuerdo.

Hamás ha señalado que Israel no ha cumplido con sus obligaciones, como permitir la entrada de tiendas de campaña y refugios para los desplazados en Gaza. Por su parte, Israel ha amenazado con reanudar las hostilidades si no se liberan más rehenes.

Además, la situación humanitaria en Gaza sigue siendo crítica. La entrada de ayuda humanitaria ha sido limitada, y la reconstrucción de la infraestructura destruida avanza lentamente.

La comunidad internacional continúa abogando por un acceso humanitario sin restricciones y por esfuerzos sostenidos para la reconstrucción de la Franja de Gaza.

A pesar de estos desafíos, muchos palestinos en Gaza y en la diáspora mantienen la esperanza y la determinación de permanecer en su tierra.

La propuesta del Presidente Donald Trump de reubicar a la población palestina ha sido recibida con indignación y rechazo por parte de la comunidad palestina, que la ve como un intento de despojo y desplazamiento.

Líderes y ciudadanos han expresado su firme intención de resistir cualquier intento de evacuación forzada y de trabajar por la reconstrucción y el futuro de Gaza.

En este contexto, el futuro de Gaza sigue siendo incierto. Las propuestas y debates en curso reflejan las profundas divisiones y desafíos que enfrenta la comunidad internacional para encontrar una solución justa y duradera para este territorio y su gente.