Una mujer argentina que ha vivido en Chile por más de 20 años se encontró con un problema inesperado al regresar de un viaje a Finlandia.

Al llegar al aeropuerto de Santiago, la Policía de Investigaciones (PDI) le informó que no podía entrar al país porque su permiso de residencia había sido revocado.

La mujer, que no sabía nada sobre esta revocación, quedó sorprendida y presentó un recurso legal para defender su derecho a regresar a Chile, donde ha residido por tanto tiempo.

El problema comenzó cuando el Servicio Nacional de Migraciones tomó la decisión de quitarle la residencia definitiva a la mujer, debido a una condena que recibió en 2016 relacionada con un delito menor.

A pesar de que la condena no implicó cárcel, las autoridades decidieron que debía abandonar Chile y prohibirle el ingreso durante 20 años.

Sin embargo, la mujer nunca fue notificada de forma adecuada sobre esta decisión, ya que el aviso fue enviado a un domicilio donde ella ya no vivía y, más tarde, por correo electrónico a una dirección que tal vez no revisó.

La mujer, al verse en esta situación, decidió presentar un recurso de amparo, argumentando que la resolución que le impedía entrar al país no era válida porque no había sido notificada como corresponde.

Este recurso llegó a la Corte de Apelaciones de Santiago, que revisó el caso y le dio la razón.

La Corte concluyó que, como la mujer nunca fue informada correctamente de la decisión de revocar su residencia, esta no puede ser aplicada de inmediato.

Por lo tanto, la Corte ordenó que se le permitiera ingresar a Chile mientras se resuelve todo el proceso legal. El fallo también reconoció que al impedirle la entrada sin una notificación adecuada, se estaba afectando su derecho a moverse libremente.