El especialista Mamdouh Refaat, Chief Data Scientist de Altair, responde a los mitos en torno al mundo laboral que surgen con el desarrollo de Inteligencia Artificial (IA), asegurando que esta no eliminará los empleos, pero sí transformará y desplazará roles.

Según datos de Pew Research Center, una quinta parte de los trabajos a nivel mundial tienen empleos que podrían ser automatizados.

Los más afectados por esta automatización de las funciones serían las mujeres, trabajadores asiáticos, trabajadores con estudios universitarios, e incluso los funcionarios mejores pagados.

Sin embargo, este tipo de alertas se originan a partir de informes que, según el especialista, se basan en opiniones de la población, la cual no es especializada en el tema.

"Vemos afirmaciones como “el 25% de los empleos desaparecerán para 2030”, pero ¿en qué se basan estas cifras?", se pregunta Refaat.

Sin embargo, "es incorrecto pensar en la IA gen como un impacto de suma cero en el empleo", ya que esta podría transformar y desplazar roles existentes.

Mientras tanto, las empresas todavía se encuentran en procesos de aprendizaje respecto al personal que necesitan y el manejo de IA.

"Habrá una curva de aprendizaje colectiva a medida que cada organización descubra lo que mejor se adapta a sus necesidades".

Lo importante es entender que, la disyuntiva hombre versus máquina no es el enfoque correcto para pensar en la IA.

Más bien, "es más una cuestión de 'hombre y máquina'", sostiene. "La IA generativa es una herramienta, y los humanos siempre hemos convivido con herramientas. Aunque esta tecnología es poderosa y diferente, sigue siendo una herramienta que usamos en nuestras computadoras o teléfonos", explica.

Para algunas personas, las máquinas IA transmiten la idea de que pueden "pensar", pero esto es desmentido por Refaat, ya que sólo cuentan con sistemas de programación altamente entrenados.

"La IA puede sugerir rutas que no habríamos considerado, pero no puede crear nuevas carreteras", sentencia.

Así que, por el momento, la posibilidad del desarrollo de una IA más avanzada que la existente en la actualidad, que sea capaz de razonar como un humano, no es viable.

"Personalmente, creo que nunca alcanzaremos la IAG. Es un desafío mucho más complejo que simplemente conducir un auto", finaliza.