Una bodega en La Serena, donde se guardan repuestos para maquinaria minera, fue cerrada por el municipio el pasado 22 de enero.

La decisión del cierre se tomó porque trabajadores de otra empresa, que pertenece al mismo dueño y comparte el mismo lugar, fueron encontrados sacando materiales del río Elqui, una acción que está prohibida.

Sin embargo, la empresa afectada por el cierre argumentó que ellos no tenían nada que ver con la extracción de materiales y que necesitaban el espacio para seguir trabajando normalmente.

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Ante esta situación, la empresa decidió defenderse y presentó un recurso de amparo económico, es decir, una solicitud formal para que revisaran su caso, argumentando que el cierre de su bodega fue injusto y les impedía seguir trabajando.

Explicaron que en esa bodega guardan piezas importantes que se usan para reparar maquinaria en distintas minas de la región, y que cerrarla sin razones válidas afectaba su derecho a trabajar y llevar adelante su negocio.

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La Corte de La Serena, después de revisar el caso, estuvo de acuerdo con la empresa. Los jueces concluyeron que, aunque la otra empresa del mismo dueño había cometido infracciones, no era justo cerrar el galpón que estaba siendo usado para una actividad completamente diferente y legal.

Por lo tanto, decidieron que el cierre había sido excesivo y ordenaron que la bodega fuera reabierta.

Esta decisión fue luego confirmada por la Corte Suprema, asegurando que la bodega podía volver a operar. Este fallo fue un alivio para la empresa, ya que les permite continuar con sus operaciones y mantener su negocio en marcha.

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