En El Desconcierto conversamos con la Subsecretaría de Minería, Suina Chahuán, sobre los recientes anuncios respecto de la Estrategia Nacional del Litio que apuntan a nuevas protecciones medioambientales y a una diversificación de las relaciones público-privadas en la industria, entre otras novedades.

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Respecto a la Estrategia Nacional del Litio en sí, la subsecretaria recordó que “es una oportunidad de desarrollo productivo importante para nuestro país, pero también tiene una importancia global. Nosotros estamos en un contexto de crisis climática, en donde la transición energética es un imperativo. Tenemos la suerte de que la minería juega un rol fundamental para la provisión de los minerales que son críticos para esa transición energética”.

“Y digo la suerte porque en Chile tenemos mucho cobre, tenemos harto litio también, tenemos una oportunidad bien importante de contribuir a esta transición energética a través de la provisión de estos minerales críticos, y también una oportunidad de construir una industria que haga una promesa en torno a una nueva minería, una minería que es la minería que necesita el mundo, una minería que tenga también un compromiso de desarrollo más sostenible en términos social y ambiental. Así que la Estrategia Nacional del Litio representa de alguna manera esa oportunidad, de como país desarrollar una industria con nuevos estándares, y al mismo tiempo contribuir con una causa global que es la transición energética”.

[caption id="attachment_910466" align="aligncenter" width="481"] Salar de Atacama[/caption]

En esa misma línea indicó que “hace menos de un año el gobierno propuso esta Estrategia Nacional del Litio, que es una estrategia bastante robusta, una estrategia compleja, que se compone de distintos hitos, es bastante interministerial, porque un desafío de esta envergadura requiere la coordinación a nivel general del gobierno, de todos los ministerios, y es una estrategia que propone, como te decía, el desarrollo de la industria del litio con nuevos componentes”.

Sobre esos nuevos componentes, profundizó asegurando que “en la Estrategia Nacional del Litio nos proponemos hitos bastante significativos. Hay un compromiso importante con el desarrollo sostenible en términos sociales y ambientales, como te decía, ahí nos comprometimos de forma bien explícita a desarrollar esta industria con los territorios (…) y el avance de una estrategia con compromisos de consulta indígena en los casos en que haya susceptibilidad a afectación indígena y de construcción con los territorios, en el sentido de un amplio diálogo social, un diálogo social que además es de manera permanente. Todo eso nos permite ir construyendo una industria que es distinta”.

Y agregó que “en el sentido del desarrollo de sostenibilidad ambiental hay compromisos explícitos en la estrategia con la protección, y eso tiene que ver con el anuncio que se hizo esta semana, con la protección de ecosistemas. Un antecedente que es bastante inédito también en el desarrollo de una industria productiva, que ex-ante nos comprometamos a la protección significativa de un área de al menos 30% de los ecosistemas, es bastante importante (…) la idea es superar una industria que solamente exporte la materia prima y que seamos capaces también en Chile de agregar valor, de avanzar en la cadena y poder generar industria con el litio, no solamente para exportar carbonato de litio, sino que también avanzar en la cadena de valor que nos permita generar nuevas tecnologías, productos de una calidad superior y más complejos, que nos permitan también construir una economía en torno al litio que sea más robusta (…) y mejores empleos”.

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La subsecretaria igualmente destacó la nueva relación del Estado con los privados en este proceso, detallando que otro ítem importante de la estrategia es “el desarrollo de manera colaborativa entre el sector público y el sector privado”, apuntando que “hay un liderazgo público Estatal marcado en la estrategia nacional del litio, pero también es bastante explícita la estrategia en señalar (…) que el tamaño del desafío es bastante grande y creemos que tenemos que hacerlo en colaboración público-privada. Por cierto, hay definiciones estratégicas donde el Estado tiene un rol fundamental y nos hemos encargado de que aquello ocurra, pero también con cumplir esta integración entre las empresas públicas y las empresas privadas, que nos van a permitir, con los distintos valores y capacidades que tienen estos dos mundos, integrar y hacerle frente a los desafíos que implica crear esta industria”.

La autoridad enfatizó que “esta semana, como Gobierno, entregamos dos tipos de información fundamental. Por un lado, dimos información relevante respecto del rol y la forma en que va a participar tanto el Estado como los privados en el desarrollo de la industria. Y por otro lado establecimos decisiones en relación al conjunto de salares y cuáles de ellos se van a proteger y cuáles de ellos son susceptibles de explotación en un futuro”.

“Entonces, en relación a lo primero (...) el Comité de Ministros para el Litio y el Consejo de Sustentabilidad y Cambio Climático tomaron decisiones relevantes en torno a tres modelos de desarrollo de la industria, por decirlo de alguna manera. El primer modelo, expresa un liderazgo estatal. Nos referimos a los salares de Atacama y de Maricunga. En estos dos salares, por el potencial extractivo que tienen y por considerarse estratégicos para el desarrollo de la industria, lo que se definió es que el Estado va a tener una participación mayoritaria en la expresión societaria del desarrollo de esta industria, por lo que el Estado tiene que asegurar un 50% más uno de las acciones y por tanto, tener un control sobre las decisiones productivas”.

[caption id="attachment_910468" align="aligncenter" width="480"] Salar de Atacama[/caption]

“En un segundo modelo, está el salar de Pedernales y hay cuatro salares que componen el proyecto que se llama Salares Altoandinos, que desarrolla ENAMI en la región de Atacama (...) lo que se ha establecido es que son nuestras empresas públicas las que van a liderar, pero no deben tener el 50% más uno de las acciones necesariamente. Se establece una cierta flexibilidad en nuestras empresas para que busquen las acciones y las mejores formas de asociación que permitan asegurar el desarrollo de la industria en estos salares”.

“Y en el tercer modelo, que probablemente es lo más significativo, y respecto a lo que ha rondado la conversación durante esta semana, es un conjunto de salares (alrededor de 26), en torno a los cuales los privados van a poder liderar. Entonces, en este conjunto de salares puede existir colaboración público-privada, no es que se impida la asociación entre el Estado y los privados, pero lo que se señala es que los privados van a tener la iniciativa de alguna manera”.

Ahondando en los llamados RFI, o manifestación de interés en español, la subsecretaria afirmó que con esta herramienta “los privados van a poder (…) en un proceso de 'llamado de interés', incluso competitivo, avanzar en el desarrollo del proyecto en estos salares. Entonces, esas definiciones que hasta hace, una semana atrás no se tenían tan claras, nos permiten de alguna manera dar certidumbre respecto al rol que tanto el Estado como los privados van a tener en esta industria. Y creemos que eso aporta bastante a la consolidación de la estrategia”.

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Como siempre, las y los invitamos a revisar la entrevista completa en esta nota de El Desconcierto, donde también conversamos con la subsecretaria Suina Chahuán sobre los desafíos ambientales, el trabajo con las comunidades originarias en las zonas de explotación de minerales, las críticas -que persisten en ciertos sectores- tras la vinculación del Estado con la empresa SQM, y mucho más.