Revelador chat filtrado de Republicanos confirma el "'que se jodan’ no fue solo un slogan"

A pocos días del plebiscito constitucional La Tercera dio a conocer una discusión interna del Partido Republicano que se dio a través de WhatsApp. En ella, Cristián Valenzuela —ideólogo de la tienda— admitió que “nunca fue la idea” redactar una Constitución de consenso.

“Se rindieron a cambiar un Estado subsidiario por uno de derechos sociales. Y tamaña concesión tampoco logró el objetivo de presentar una Constitución de amplio consenso. Corrieron el cerco a cambio de nada”, cuestionó en el chat interno del partido el militante Roberto Weissohn.

Estrategia del no al concenso

En respuesta a la crítica planteada, Valenzuela admitió que “el objetivo nunca fue presentar una Constitución de amplio consenso”. Asimismo, la mano derecha de José Antonio Kast negó que se haya cambiado el Estado subsidiario por uno social y democrático de derecho como lo expresa el texto redactado por los consejeros republicanos y de Chile Vamos.

[caption id="attachment_886026" align="aligncenter" width="900"] Cristian Valenzuela, Director ejecutivo de Ideas Republicanas, en el Consejo Constitucional. Agencia Uno.[/caption]

La conversación se enmarca en una tensión interna en el Partido Republicano que se arrastra desde el trabajo del Consejo Constitucional. Los “bordes” del proceso y el anteproyecto de los expertos no conformaban a las bases.

Y pese a que los consejeros republicanos intentaron —y en ciertos puntos lograron— modificar el proyecto, varios aspectos de la propuesta incomodan a las bases. De hecho, la discusión constitucional desembocó en la renuncia del senador Rojo Edwards junto a otros 25 militantes.

Pero ahora, además de lidiar con los cuestionamientos internos, Republicanos ha debido enfrentar las críticas desatadas tras la filtración del audio. “Siempre buscaron escribir una Constitución solo por y para ellos”, cuestionaron desde el oficialismo luego de que se conociera la conversación.

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Oficialismo confirma tesis

El chat revelado fue rápidamente ocupado por el oficialismo para reforzar el punto que se ha planteado desde que se instaló el Consejo Constitucional; que la derecha nunca quiso llegar a un texto que acogiera a todos los sectores de la sociedad.

Dicha discusión fue reiterativa en este segundo proceso constitucional. En varias ocasiones se emplazó a Republicanos a llega a consensos, mientras que los consejeros de la tienda liderada por Kast respondían que habían dado los espacios para buscar acuerdos que se extendieran —si era posible— hasta el PS.

Es por esto que al revelarse la conversación fueron los integrantes del disuelto Consejo Constitucional los primeros en arremeter contra el partido que lideró el proceso.

María Pardo, exconsejera por Convergencia Social, se refirió a los mensajes de Valenzuela en el chat interno del PR asegurando que estos eran “un reconocimiento” de lo que se había negado durante el proceso de redacción de la propuesta.

“Por fin leo un reconocimiento en palabras de lo que negaban sus discursos pero admitían sus acciones durante los 5 meses que duró el trabajo del Consejo Constitucional. Como delegada, participé en todas las instancias de negociación, y en cada una de ellas me quedó clarísimo que llegar a acuerdos y buscar los consensos era la última de sus prioridades”, expresó la exconsejera.

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Texto sesgado y perjudicial

En esa línea, Pardo sostuvo que el hecho de que no sea un proyecto fruto de los acuerdos “se nota en el resultado: un texto que no solo es sesgado, sino también perjudicial para la mayoría de las y los chilenos”.

Por su parte, Antonia Rivas, ex comisionada experta y ahora vocera del En contra, cuestionó que se haya criticado al oficialismo por no buscar acuerdos en el consejo cuando en realidad era Republicanos quiénes non estuvieron dispuestos a un pacto constitucional.

“Nos dijeron intransigentes, nos dijeron que no queríamos acuerdos, cuando en realidad todo fue una apariencia, siempre buscaron escribir una constitución solo por y para ellos. Por eso hacían campaña anticipada con sus normas cuando pretendían ‘negociar’”, emplazó Rivas.

El diputado Gonzalo Winter (CS) también abordó la polémica e hizo referencia al slogan de campaña del A favor, el “que se jodan”.

“El ‘que se jodan’ no es solo un slogan: forma parte de la realidad de un texto fanático y sectario que republicanos anhela llamar Constitución con el único afán de excluir a quienes no piensan como ellos”, aseguró el diputado en referencia a publicación del chat filtrado.