Un primer episodio de El Niño costero provocó un "shock" en la economía peruana en mayo pasado, que generó una caída del PBI del 1,4 %, y aún existe "incertidumbre" sobre la magnitud del nuevo fenómeno climático de los próximos meses, afirmó Contreras en rueda de prensa con corresponsales extranjeros en Lima.

"Hace cuatro años que no se realizaban obras de prevención que nos permitan enfrentar de manera estructural a El Niño", dijo el ministro.

Reconstrucción

Ahora "necesitamos prepararnos para El Niño global, descolmatando ríos" para evitar las inundaciones que generen daños y futuras reconstrucciones de infraestructura, añadió.

En ese sentido, Contreras aseguró un presupuesto para la emergencia de "4.000 millones de soles (US$1.000 millones) que probablemente se eleven a 5.000 millones de soles", de acuerdo a la necesidad de obras de prevención y reconstrucción que se necesiten.

"Hay mucha incertidumbre sobre la gravedad de El Niño, pero nos estamos preparando para el peor escenario" y, de esa forma, "habremos protegido a la población e infraestructura" del país.

2003 generó recesión

El primer evento del fenómeno de El Niño a inicios del 2023 contribuyó a que los analistas hablen de una recesión de la economía peruana que se sumó a las protestas sociales, pero Contreras prefiere referirse a "una desaceleración".

"Lo veo más como un proceso de desaceleración, pero crecer al 1% es muy poquito para la economía peruana", anotó el ministro sobre la proyección del PBI de julio.

"Tenemos que volver al 3% y luego ver cómo crecer al 4%, añadió Contreras. / EFE