Por lo menos 100 millones de niñas y niños en el mundo no aprendieron o tendrían dificultad para leer tras el cierre de miles de colegio producto de la pandemia por Covid-19, de acuerdo a cifras oficiales entregadas por la Unesco.

Por desgracia, las cifras no son mejores en nuestro país, donde sólo el 40% de los estudiantes que pasa a segundo básico sabe leer y escribir, escenario que solo mejoraría en cuarto básico. 

"La no conexión de los estudiantes a las clases online y la ausencia de supervisión por parte de los padres durante el desarrollo de éstas debido a las obligaciones laborales fueron las principales razones", explica la profesora de Lenguaje de primer y segundo ciclo académico, María Elena Villalobos.

De hecho, según la fonoaudióloga Andrea Gómez, la exposición a las pantallas jugó un rol fundamental en esta problemática. "Los niños tienen menor capacidad de atención, mayor frustración; con las pantallas aprenden que todo es inmediato; por lo que enfrentarse al proceso de la lectoescritura, que es lento y requiere mayor esfuerzo, no les resultó agradable o de su interés", señaló.

¿Cómo revertir las cifras en nuestro país?

La estimulación compartida se plantea como una de las formas para revertir la problemática, donde la recomendación es acercar a las niñeces a descubrir la lectura de acuerdo a sus propios intereses, ya sea desde cuentos hasta cómics o adivinanzas.

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Pero las especialistas advierten que la prevención juega un rol fundamental. Sobre ello, Villalobos recomienda mantenerse alerta a los comportamientos de los niños y niñas y su forma de interactuar la forma en que interactúan con el entorno y sus padres.

"Si su hijo no identifica vocales, y no es capaz de generar sílabas con letras dadas, por ejemplo, la letra M es mmmmm con la A es Maaaaa, y así con todas las vocales, o si el niño(a) ya es mayor a 7 años o está en 2do básico y aún tiene una lectura silábica de palabras de alta frecuencia y con sílabas directas (mamá, papá, tomate, maleta, casa, etc.)", es muy probable que se deba acudir a un especialista, explica la profesional.

"Un estudiante que no logra adquirir las habilidades de lectura y escritura en el nivel que le corresponde genera dificultades de aprendizaje a nivel cognitivo, emocional y social", enfatizó Villalobos reiterando el llamado a la prevención y detección temprana de esta problemática.

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