Vecinos agrupados en la Coordinadora Ambiental y Social Quilicura alertaron esta semana que el proyecto de datacenter Azure de la empresa multinacional Microsoft que se construirá en la comuna podría traer graves afectaciones ambientales para la comuna.

Este proyecto fue anunciado el 9 de diciembre pasado por Brad Smith, presidente de la compañía, quien acompañado del expresidente Sebastián Piñera prometieron que esta iniciativa junto a otras permitiría que la "computación sea más accesible a velocidades aún más rápidas, proporcionando una plataforma nueva y segura para cada parte de la economía y apoyando la ambiciosa agenda digital de Chile".

En dicha ocasión Microsoft prometió que su inversión implicaría capacitar en habilidades digitales a más de 180 mil personas para 2025 y  generar 51.000 nuevos puestos de trabajo en los próximos años. Además, entre otras proyecciones comprometió cambiar totalmente el suministro de energía renovable en los centros de datos de Microsoft para 2025.

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Ligado a este último punto, declararon que el datacenter Azure sería un centro de procesamiento y protección de datos digitales consistente en una instalación de servidores que funcionan bajo un sistema de refrigeración por inmersión en líquido dieléctrico, eliminando el consumo de agua. En este mecanismo se utiliza la menor cantidad de espacio, compactando los servidores y colocándolos dentro de un sistema cerrado de refrigeración donde recircula de forma constante el líquido, recapturando el que se evapora para que retorne.

Sin embargo, organizaciones de vecinos de Quilicura denuncian que esta última promesa no se estaría llevando a cabo, lo que generaría un importante daño ambiental.

"Las promesas fueron falsas"

Según indicó un informe realizado por Rodrigo Vallejos, miembro de la organización Resistencia Socioambiental Quilicura (RSQ), "las promesas de Microsoft de instalar un datacenter de última tecnología en Chile fueron falsas, ya que el 13 de diciembre del 2021 la sucursal chilena de la empresa presentó ante el Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) del proyecto 'Microsoft SCL03' y describe un datacenter totalmente diferente al modelo Azure prometido por la empresa en su llegada a Chile".

"Según lo presentado en el proyecto, el datacenter no implementaría un sistema de refrigeración por inmersión en líquido dieléctrico, sino que se enfriaría a través de evaporación directa, que consiste en evaporar directamente el agua en el aire, reduciendo así su temperatura y humectándolo, mediante un sistema que impulse el aire entre el exterior y el interior de las salas donde se encuentren los servidores", explica Vallejos en el documento.

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Luego, agrega que "esta refrigeración solo debería funcionar en los casos en que la temperatura del aire exterior sea superior a los 29.44°C, lo que la empresa estima que sería 25 días al año, para lo cual se requeriría el consumo de más de 610.000 litros de agua diarios. Esto sin considerar que el territorio donde se emplazará el proyecto se encuentra afectado por un proceso de desertificación acelerado por el calentamiento global".

"Otra inconsistencia de Microsoft entre el proyecto prometido y el datacenter presentado consiste en el combustible utilizado para los generadores de emergencia, ya que los generadores contemplados en Microsoft SCL03 funcionan a través de petróleo diésel y no con una alternativa más ecológica que busque eliminar la huella de carbono al 2050, como lo expresa la empresa públicamente en su página oficial", complementa.

Otros proyectos en Quilicura

Este no es el primer proyecto de este tipo que se ha instalado en la comuna al norte de Santiago. Quilicura es uno de los polos industriales más grande del país, donde se encuentran empresas como CCU, Ab Inbev, Lessafre, KDM, Oxiquim, Panimex, entre muchas otras.

En el año 2012 ingresó el primer datacenter a la comuna, a cargo de la empresa Sonda a través de una consulta de pertinencia para evitar ser evaluada ambientalmente por el SEA, su sistema de refrigeración utiliza 640.813 litros de agua diarios que son reutilizados en mantener en óptimas condiciones el Club de Golf Aconcagua, según detalla el informe de RSQ.

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Luego, en el 2013 con una nueva consulta de pertinencia fue ingresado el datacenter Param, de Google, el más grande de Sudamérica hasta este momento y que cuenta con derechos de aguas inscritos para extraer 50 litros de agua por segundo del acuífero del Maipo.

Los últimos datacenters instalados en Quilicura y los únicos sometidos al Sistema de Evaluación de Impacto Ambiental del SEA son Ascenty 1 y 2 (ambos aprobados en 2021), que utilizan un sistema chiller de recirculación de agua, para los que se necesitan aproximadamente 600.000 litros de agua al año.

Humedales en riesgo

"La carga ambiental de las empresas sobre el territorio de Quilicura es brutal, por lo que todos los proyectos que están ingresando a la comuna están bajo la mirada atenta de la comunidad quilicurana, la que lucha por recuperar los humedales que fueron reconocidos en 468,3 hectáreas por el Ministerio del Medio Ambiente y se encuentran en un estado de fragilidad evidente", indica el documento desarrollado por la agrupación de vecinos de Quilicura.

Y agrega que "'Microsoft SCL03' representa una nueva amenaza ambiental para este valorado ecosistema, ya que Microsoft Chile pretende comprar el agua para su sistema de refrigeración a la empresa de servicios sanitarios Explotaciones Sanitarias S.A (ESSA), la que trata el agua del sector industrial para devolverla al principal afluente que alimenta los humedales de la comuna: el Estero Las Cruces. Esto provoca preocupación en las organizaciones ambientales y sociales de la comuna, porque la empresa no ha sido capaz de clarificar cuál sería el real impacto del proyecto sobre el caudal hídrico del Estero y, por ende, de los Humedales".

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"Microsoft también señala en la sección 1.6.2.5. de la Declaración de Impacto Ambiental, que las líneas de transmisión eléctrica contempladas para el abastecimiento energético del proyecto se emplazarían sobre el canal San Ignacio, que es uno de los principales aportantes del Estero Las Cruces, sin aclarar cuál sería el real impacto electromagnético y de la construcción de estas torres de tensión eléctrica", añade.

Por estos motivos, la Coordinadora Ambiental y Social Quilicura solicita la apertura de una proceso de participación ciudadana del proyecto ante el SEA y que las personas que se sientan afectadas ingresen observaciones ante el Servicio de Evaluación Ambiental, para lo que existe un plazo que culmina el 30 de marzo.