La diputada Ximena Ossandón le pidió al Gobierno que decrete duelo oficial permanente en Chile, debido a la cantidad de muertos que día a día sigue aumentando producto de la pandemia y que hoy ya suma 890 personas fallecidas.

“A mí me parece sumamente necesario rememorar continuamente a las personas que todos los días vemos fallecer: tiene que ver con la dignidad de ellos y también con la señal que queremos entregar como país. El duelo nacional es una manera de decirles a las familias que compartimos su dolor y es además un gesto de empatía del gobierno con sus ciudadanos. Los muertos que llevamos no son un número más que se archiva en una planilla, porque detrás hay mucho dolor y sufrimiento”, asegura la legisladora que envió una carta al respecto al Presidente Sebastián Piñera.

“Los pueblos vivimos de símbolos. Gracias a ellos tenemos una identificación con la realidad. En Chile estamos normalizando la muerte y hasta vemos las cifras como algo súper normal. Lo que está pasando es una catástrofe y además de la ayuda material para la gente también las sociedades se construyen a través de la espiritualidad. Decretar duelo nacional es unir a la comunidad en torno a un mismo propósito y también es seguir creando conciencia entre la gente que lo que vivimos es una verdadera tragedia y no un juego como muchos aún creen”, apuntó la representante del Distrito 12.

Sobre el punto de suspender todas las actividades con carácter de festejo, la legisladora cree “que es lo mínimo que podriamos hacer. De seguir la pandemia, hay muchas celebraciones como las Fiestas Patrias que probablemente no podríamos realizar, y lo más lógico sería hacer una conmemoración y no un festejo masivo de la fecha. A mi juicio la unidad no solo debe reflejarse en un apoyo mutuo para superar el contagio, sino también la unidad debe darse a la hora de recordar y llorar a los muertos. La unidad se vive también en el dolor, que debe ser un dolor nacional”.

La diputada RN dice que decretar duelo “no significa pesimismo. El duelo es respeto, es configurar comunidad y hacer memoria de las víctimas. Pero también es crear conciencia entre los chilenos del momento que estamos viviendo. Hoy nuestros muertos ni siquiera pueden tener funerales normales, no han podido ni siquiera tener una despedida religiosa o ritual como ocurre en nuestros pueblos originarios. Por eso planteo la urgencia de hacer esto, para que mostremos como chilenos que sí estamos empatizando con los otros y que practicamos realmente la solidaridad".