En septiembre de 2021, un cliente compró un furgón nuevo a la automotora Hernández Motores S.A. por un monto de $16.154.845.

Sin embargo y según se puede apreciar en el fallo judicial, en marzo de 2022, el vehículo comenzó a presentar fallas mecánicas y electrónicas, lo que llevó a su ingreso al servicio técnico de la automotora.

Desde entonces, el furgón permaneció bajo custodia de la empresa sin que se diera una solución efectiva al problema, impidiendo a la compradora utilizarlo para sus actividades comerciales.

Ante la falta de respuesta por parte de la automotora, el cliente solicitó la resolución del contrato y la devolución del dinero pagado.

Argumentó que el incumplimiento era grave, ya que el vehículo adquirido no era apto para el uso previsto y la automotora no garantizó su adecuado funcionamiento.

El Vigesimoprimer Juzgado Civil de Santiago acogió parcialmente la demanda y ordenó la resolución del contrato, estableciendo que la automotora incumplió con su obligación al no entregar una solución en un plazo razonable.

En el fallo, el juez Marcelo Rojas Sepúlveda determinó que “ha transcurrido un lapso excesivo en el cual permanece el furgón bajo su custodia, sin dar pronta y cumplida solución al problema que aqueja a la demandante”, lo que justificaba la terminación del contrato y la restitución del dinero.

El tribunal ordenó a Hernández Motores S.A. devolver la suma de $16.154.845, con reajustes según la variación del IPC y los intereses corrientes hasta la fecha del pago.

No obstante, rechazó la solicitud de indemnización adicional por intereses y arriendo de otros vehículos, debido a la falta de pruebas que acreditaran estos gastos.