En Chile, la riqueza cultural no se limita a las grandes ciudades; cada rincón del país es hogar de un potencial artístico invaluable. Nuestra región que ha sido cuna de grandes escritores, músicos, artistas visuales, teatristas como Daniel Belmar, Omar Lara, Gonzalo Rojas, Wilfred Junge, Sandra Santander, Eduardo Meissner, Vicente Gajardo, Patricia Chavarría y sin duda alguna el famoso Teatro de la Universidad de Concepción (TUC).

Más recientemente, bandas emblemáticas como Los Tres y Los Bunkers, originarios de Concepción, han llevado la música chilena a escenarios internacionales, demostrando que el talento y la creatividad florecen en todo el territorio nacional. Estos ejemplos son sólo algunos de los más conocidos; sin embargo, en cada provincia y localidad de Chile existen creadores que trabajan con pasión y dedicación. Hombres, mujeres y jóvenes que requieren de una política cultural que los abrace y respalde, promoviendo y apoyando el arte en todas sus formas.

La Corporación Cultural Artistas del Acero ha sido un pilar fundamental en la promoción de las artes en la Región del Biobío desde su fundación en 1958. No solo preservando y difundiendo la riqueza cultural de nuestra región, sino que también impulsamos el desarrollo de jóvenes talentos a través de iniciativas como las Jornadas Musicales del Biobío. El reciente gran concierto en el Teatro Regional, celebrado el 31 de junio, fue una clara muestra del impacto positivo de estas actividades, con la participación de más de 500 jóvenes músicos provenientes de 27 orquestas de la región.

Sin embargo, la crisis actual que enfrenta la Siderúrgica Huachipato, principal sostenedora de Artistas del Acero, amenaza la estabilidad de nuestra corporación y, por ende, el futuro de muchas iniciativas culturales y en espacial la que se desarrolla en los territorios de la región, como la formación de espectadores, programación de funciones de teatro, danza, música, que permiten a la comunidad artística local y nacional presentar sus creaciones, siendo un gran espacio de empleabilidad del sector.

Esta situación de incertidumbre pone en riesgo la continuidad de nuestros programas y el acceso de los jóvenes a oportunidades artísticas que enriquecen sus vidas y las de nuestras comunidades.

Es imperativo que las autoridades de todos los sectores y colores políticos reconozcan la importancia de apoyar a instituciones culturales como Artistas del Acero. La preservación del patrimonio, la memoria cultural y la promoción de la creación artística no son solo responsabilidades del Estado, sino un compromiso compartido que debe ser respaldado con recursos y políticas efectivas.

La cultura no debe depender de la crisis económica de un solo sector; es un bien público que debe ser sostenido y fomentado para garantizar un futuro vibrante y diverso para todas las regiones de Chile.

Continuaremos nuestra labor con la firme convicción de que el arte y la cultura tienen el poder de transformar vidas. Los niños y jóvenes que participan en nuestras orquestas, provenientes de 25 comunas, muchas de ellas con recursos limitados, han experimentado un cambio profundo en sus vidas.

Para muchos, la música representa no solo un espacio de crecimiento, sino una vía para construir un futuro mejor y, porque no, una futura profesionalización en esta área. La dedicación y el talento que muestran en cada ensayo y presentación reflejan sus aspiraciones y el impacto positivo que estas experiencias tienen en sus familias y comunidades.

El arte tiene el poder de abrir puertas y ofrecer nuevas perspectivas, y es nuestra responsabilidad asegurar que estos jóvenes continúen teniendo acceso a oportunidades transformadoras. La inversión en la cultura es una inversión en el futuro de nuestros niños, en la fortaleza de nuestras comunidades y en el desarrollo de una sociedad más inclusiva y enriquecida por la diversidad artística.

Crédito de la fotografía: Agencia Uno