Ecoconstituyentes | Diego Figueroa: “Para establecer un Estado Ecocéntrico el modelo económico no puede ser neoliberal”

Ecoconstituyentes | Diego Figueroa: “Para establecer un Estado Ecocéntrico el modelo económico no puede ser neoliberal”

Por: Loreto Contreras | 10.03.2021
Diego Figueroa Beecher es oriundo de La Serena, científico, bailarín y activista ambiental. Se ha hecho parte de la organización universitaria como estudiante de bioquímica y biología marina. Conforma la Lista del Pueblo Movimiento Territorial Constituyente de la región de Coquimbo por el Distrito 5. Considera que el Estado debiese tener un carácter Ecocéntrico y el progreso científico estar garantizado constitucionalmente para hacer un aporte sustantivo en la construcción de políticas para superar la crisis ambiental que atraviesa el país.

Desde Bienes Comunes de El Desconcierto, conversamos con candidatos y candidatas constituyentes de diferentes sectores políticos y sociales con propuestas que buscan incluir al medioambiente como uno de los ejes centrales en sus programas.

A continuación, compartimos reflexiones, lineamientos y posturas de Diego Figueroa Beecher, candidato independiente a la Convención Constitucional por el Distrito 5 en la Lista del Pueblo Movimiento Territorial Constituyente.

¿Cuáles son los principales ejes ambientales de tu candidatura?

Que nuestro Estado sea Ecocéntrico, entendiendo al ser humano como un componente de los ecosistemas. El derecho a un ambiente saludable y que se considere sujeto de derecho a la Naturaleza, de esta manera se promoverá la protección y conservación de la biodiversidad. Al entender un Estado Plurinacional, se mantendrá el resguardo de la Naturaleza según la cosmovisión de nuestros pueblos originarios y su relación con el entorno.

A su vez, que la Constitución garantice el derecho y acceso al agua en todo el territorio nacional y que sea un bien público. En materia educacional que se considere a la educación ambiental y su concienciación como uno de los pilares en la enseñanza chilena. Así también, que nuestro país establezca y garantice un modelo de desarrollo sostenible, consciente de las interacciones y relaciones del ser humano con la Naturaleza. Para hacer esto posible es necesario que se establezcan mecanismos de monitoreo, control y fiscalización en materia ambiental, que sea operado con un sistema de información pública, transparente, gratuito y expedito sobre los sistemas de monitoreo existentes.

¿Qué opinión tienes de las políticas ambientales en Chile durante los últimos 30 años?

En materia legal en los últimos 30 años se aprobó la ley 19.300 que asienta las bases generales del Medio Ambiente, la cual declara teoría ambiental pero a fin de cuentas no se lleva a la práctica. En esta ley no se busca la prevención de los daños ambientales, sino que, si alguien causa daño al Medio Ambiente estará obligado a reparar e indemnizar aquel daño generado. Menciona también que “el Estado deberá propender a una adecuada conservación, desarrollo y fortalecimiento de la identidad, comunidades y pueblos indígenas”, y evidentemente esto no se cumple porque las forestales en el sur de Chile no respetan la identidad ni el desarrollo de los pueblos.

Existe además una “Evaluación Ambiental de las políticas y planes que tengan un impacto sobre el Medio Ambiente o la sustentabilidad”, pero, aunque algunos proyectos se hayan rechazado, se pueden seguir apelando porque en nuestro modelo prima el aspecto económico de un grupo minoritario de ciudadanos por sobre todas otras las necesidades de los territorios.

Agregando a lo anterior, las autoridades con las empresas fraguan las resoluciones para tener esta evaluación aprobada, aprovechando los vacíos legales de esta legislación actual. Es decir, tenemos una ley ambiental pero que la sobrevuelan las autoridades, las empresas y los grupos económicos que lideran nuestro desarrollo neoliberal actual. Y a pesar de que existe participación ciudadana en estos procesos de evaluación ambiental, no son siempre consideradas las opiniones de expertos, ni menos de ciudadanos civiles ante la toma de decisiones. Por último, sigue en trámite desde hace 10 años en el Congreso Nacional el SBAP, que permitiría la conservación de la biodiversidad y las áreas protegidas que actualmente están en manos de cinco ministerios a la vez, lo que dificulta bastante un trabajo eficiente en materia ambiental.

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Actualmente no sólo vivimos una crisis ambiental, sino una crisis civilizatoria debido a la concepción y relación utilitarista de algunos humanos/empresas con la Naturaleza. ¿Qué elemento de la Constitución de la dictadura ha permitido llegar a este punto?

En la Constitución se predispone a que Chile desarrolle un modelo neoliberal, manteniendo un sistema extractivista con nuestros recursos naturales, que se mantienen en su mayoría privatizados. Además, aparecen una serie de derechos que apuntan a este sistema de desarrollo, por ejemplo, “los derechos de particulares sobre las aguas, otorgando la propiedad sobre ellas”, “el derecho a desarrollar cualquier actividad económica, respetando las normas legales que la regulen”, y muy bien sabemos que las normas legales apuntan en la misma dirección neoliberal.

Se menciona además, que “sólo en virtud de una ley, se podrán autorizar determinados beneficios directos o indirectos en favor de algún sector, actividad o zona geográfica”, y que corresponde a la ley determinar qué minas, sustancias minerales, salares, depósitos de carbón, entre otros, pueden ser objeto de concesiones de exploración o de explotación, destinando especial interés en el sistema extractivista que está devastando nuestros ecosistemas, contaminando y matando a las poblaciones aledañas. Es más, a las concesiones se les asigna un carácter de orgánica constitucional. Y, por último, el hiperpresidencialismo que existe en Chile le permite muchas atribuciones al Presidente de la República como por ejemplo fijar mediante decreto supremo las concesiones para la exploración, explotación o el beneficio de los yacimientos.

¿Qué derechos y elementos debiese garantizar una nueva Constitución?

El derecho a un ambiente saludable, el reconocimiento de la Naturaleza como sujeto de derecho. Que se garantice el cuidado, respeto, protección y conservación de la Biodiversidad. El derecho humano al agua, su justa distribución, con preferencia para el consumo de las personas y un acceso efectivo al agua potable, en especial a aquellas destinadas a los pueblos originarios. La recuperación de los recursos naturales estratégicos a beneficio del país, su industrialización sustentable y la diversificación de la matriz productiva. Procurando finalmente una relación armónica entre nuestra sociedad y la Naturaleza.

¿Qué aportes se podrían hacer desde el mundo científico, que se plasmen en una nueva Constitución, para superar la crisis ambiental?

Se debería establecer el derecho al progreso científico y en este sentido, se podría asegurar la generación de capital humano avanzado destinado al desarrollo científico y tecnológico nacional, con los recursos necesarios para su crecimiento y consolidación, para que se encarguen de buscar soluciones a la crisis ambiental que estamos enfrentando. Estableciendo centros de investigación públicos en cada una de las regiones, los cuales actúen como asesoría permanente para la toma de decisiones y que la ciencia, tecnología e innovación sean utilizados en pro del bien común.

Estamos atravesando una severa crisis hídrica donde muchas personas y animales no tienen acceso a la cantidad de agua que necesitan para vivir. ¿Crees que las plantas desalinizadoras son una solución real?

Si bien las plantas desalinizadoras vienen a resolver una problemática que es la disponibilidad de agua dulce para consumo humano y el uso de agua para la industria minera, esta es una solución momentánea, transitoria, y que a largo plazo va a generar un gran impacto negativo al ambiente natural porque lo estamos transformando. Al extraer agua del mar no solo se saca agua, sino que también organismos marinos, como larvas y pequeños invertebrados, microalgas y microorganismos que son esenciales para mantener el funcionamiento de los ecosistemas marinos. La industria minera en Chile se ubica principalmente en el norte de nuestro país donde ya hay desabastecimiento y problemas de escasez hídrica, debido a la sobreexplotación del recurso hídrico sumada a la escasez de lluvias.

Chile se encuentra entre los 30 países con mayor riesgo hídrico en el mundo para el 2025, por lo tanto, es una problemática de gran envergadura que debe analizarse desde varias perspectivas. Por una parte, se debe apuntar hacia la reparación de los ecosistemas naturales que son responsables del flujo de agua en nuestro planeta, debemos entender a los servicios ecosistémicos como fundamentales en la salud ambiental, para procurar su conservación y que podamos seguir disponiendo de ellos. Se deben, además, reutilizar las aguas lluvias y las aguas residuales que desechamos a diario en nuestros hogares, y no liberarlas en los emisarios que se vierten directamente al mar. Porque las plantas desalinizadoras utilizan bastante energía en su funcionamiento aumentando las emisiones de CO2, y el impacto que ejercerían sobre los ambientes marinos no está del todo descrito, se verterían mayores concentraciones de salmuera al mar que modificarían la composición química y física del agua, pero no se mantiene una relación armoniosa de las acciones del ser humano con la Naturaleza, pudiendo generar un colapso en el sistema.

Actualmente el SEIA se encarga de verificar el impacto en el medioambiente, pero esto no es suficiente, se deben desarrollar diferentes estrategias para mitigar esta problemática y analizarlo de manera integral, porque actualmente estas formas de funcionamiento se imponen por el bienestar humano más que por el bienestar ecosistémico, del cual también somos parte, pero no nos damos cuenta de ello en las decisiones políticas.

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En la Constitución que aún nos rige, existe el derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación, sin embargo, en la práctica eso no sucede. Por ejemplo, en la comuna de Salamanca, perteneciente al Distrito 5, se enclava la Mina Los Pelambres que dentro de su infraestructura cuenta con el tranque de relaves El Mauro, que mantienen a la comunidad de Caimanes en permanente estrés debido a la contaminación de las aguas y el aire, además del colapso de éste en cualquier minuto. ¿Consideras que existe la minería sustentable?

La minería en sí no es un proceso sustentable, que genera gran impacto en el medio ambiente y en los seres humanos, la extracción de minerales ha sido un trabajo desde hace muchos años en nuestro país, pero es un trabajo desmedido al perder la comunión con el medio ambiente. La idea es que las empresas contribuyan al bien común, pero no que dejen zonas deterioradas, vidas humanas con enfermedades crónicas y con pérdida de biodiversidad, sólo para satisfacer el bolsillo de unos pocos empresarios que controlan y regular el funcionamiento de nuestra economía.

Si se mantuviesen en parámetros que perduren en el tiempo que no pasemos a llevar a ningún componente de los ecosistémicos lo harían un sistema sostenible, pero para esto deben desarrollarse nuevas estrategias que no generen más zonas de sacrificio, porque la gente en esas zonas a veces normaliza morir de cáncer producto de la contaminación que las minerías generan en sus familias y sus cercanos, pero se mantienen allí por el trabajo y la remuneración asociada.

La minería nos limita en su funcionamiento, y a la vez, su actual estructura de funcionamiento no permite una economía circular. Los minerales no son renovables y tienen un gran aporte en la recirculación de los ciclos biogeoquímicos, por lo que, Chile debería establecer nuevas estrategias de trabajar con sus recursos naturales como lo son los minerales, pero debemos ser conscientes de lo que conllevan estas decisiones políticas. 

En tu programa mencionas la necesidad de establecer “como sujeto de derecho a la naturaleza, resguardando un desarrollo sostenible”. ¿Consideras posible garantizar plenamente los Derechos Humanos y de la Naturaleza, cuando desde la perspectiva del modelo de desarrollo, incluso con el adjetivo sostenible, condenan al sacrificio a territorios, comunidades humanas y no humanas, así como la devastación ecosistémica?

Nuestra propuesta apunta al desarrollo sostenible, y partiendo desde ese punto el modelo económico tiene que cambiar, no seguir con el modelo extractivista actual, donde no se tenga que sacrificar el bienestar de ningún componente del ecosistema, ni se devasten de manera desmesurada nuestros ecosistémicas tan codiciados por otros países. El nuevo paradigma es buscar la manera en que el desarrollo humano sea en armonía con el desarrollo ambiental y económico, estableciendo un sistema que tienda al equilibrio en la forma de considerar a los aspectos del desarrollo sostenible, propendiendo a la economía circular en nuestro territorio nacional.

¿Consideras viable construir un Estado Ecocéntrico mientras el modelo económico neoliberal no sea cambiado?

Primero hay que tener claro que para establecer un Estado Ecocéntrico y que a la vez sea efectiva nuestra propuesta, el modelo económico no puede ser neoliberal y en la nueva Constitución se tendría que establecer un nuevo modelo de desarrollo que apunte a la economía circular. Existen posibilidades para lograrlo y concretar un desarrollo sostenible, que no atente contra el Estado Ecocéntrico y que contribuya al bienestar de la Naturaleza y el bienestar de los seres humanos.

Al declararse Ecocéntrico, reconoce al ser humano como un componente del medio ambiente y al hacerlo esclarece que nuestras futuras acciones deben propender al equilibrio socioambiental. La actual crisis que enfrentamos se debe principalmente por las malas decisiones políticas que obedecen a este modelo neoliberal, y que no afecta a las familias de los empresarios que manejan las grandes empresas que devastan nuestros recursos naturales, sino que, atentan contra las familias que viven en zonas de sacrificio.

Actualmente el desarrollo debe contribuir a todas las personas que habitamos en Chile, y no solo a unos pocos. Solo así, se podrá garantizar la protección del medio ambiente pero también el de una vida digna para nuestra ciudadanía y que se disponga de las mejores condiciones para un desarrollo armónico socioambiental. 

Por último, de ser electo como convencional ¿Cuáles serían los primeros puntos que tocarías del proyecto de nueva constitución?

Nuestra propuesta constitucional se basa en 6 pilares, obviamente hay muchos otros aspectos igualmente importantes que se deben considerar, pero para lograrlo establecemos estos pilares que contribuyan en un desarrollo de un ser, humano e integral, los cuales son: Derechos Humanos, Derecho a la Educación, Derecho a la Salud, Derecho a la Cultura y a las Artes, Derecho a la Seguridad y Protección Social, y Derechos Ambientales. Con esto establecido, podremos trabajar y profundizar en otros aspectos para dirigir a un nuevo desarrollo de Chile digno, solidario y ambiental.

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