Medios de Estados Unidos y Alemania, entre otros lugares del mundo, han puesto sus ojos sobre el gesto de la Tens chilena Damaris Silva, quien ha trascendido a sus responsabilidades, apelando a su violín para llevar a los enfermos de coronavirus, invaluables momentos a causa el ambiente que genera con su instrumento.

[Te puede interesar]: VIDEO| Damaris, la TENS que alegra a los pacientes COVID-19 con su violín: “Es súper lindo y motivador”

La funcionaria de la salud, se pasea por los pasillos del Hospital El Pino, donde desempeña sus labores diarias para, desde afuera de las habitaciones de los internos, ofrendarles unos minutos que los trasladen a otro estado emocional en medio de tanta devastación.

A ritmo de violín

Una enfermera chilena consuela a pacientes con coronavirus en la UCI de un hospital al sur de Santiago, al terminar su turno comienza la música.#madeforminds /e pic.twitter.com/iZWWTpZ5om

— DW Español (@dw_espanol) July 9, 2020

Su labor ha sido no sólo destacada a través de notas elaboradas por distintos medios nacionales, sino que desde hace unos días comenzaron a circular reportajes y artículos de ella en medio internacionales como la prestigiosa cadena alemana DW, Revista Time y Univisión, entre otras notas que relevan su decisión de acompañar el complejo momento de la hospitalización con un poco de música, algo que ella ha admitido, hace para alivianar el estrés de sus pacientes, lo que evidentemente redunda en la generación de una atmósfera especial que es masivamente agradecida por quienes tienen acceso a su generosa performance artística.

Transcurrido un tiempo considerable desde que comenzó con esta iniciativa, el rito se instaló en el recinto asistencial  en el que dos veces a la semana, tras finalizar su turno, Damaris toma su violín y comienza a tocarlo mientras transita por los pasillos de los pacientes hospitalizados que se encuentran en una condición más grave a causa del impacto del virus.

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Chilean nurse Damaris Silva carries her violin before playing for COVID-19 patients in the intensive-care unit of the El Pino de San Bernardo hospital in Santiago on July 2. "As soon as I walk in the patients brighten, they seem happier; they smile and applaud," the 26-year-old told Reuters. Her goal, she added, is to "give a little bit of love, of faith, of hope with my violin. Every time I do it, I do it from my heart." According to data tracked by Johns Hopkins University, Chile has confirmed nearly 300,000 cases and more than 6,300 deaths. Photograph by Pablo Sanhueza—@reuters

Una publicación compartida de TIME (@time) el 6 Jul, 2020 a las 5:35 PDT