La pandemia del COVID-19 no permite hacer afirmaciones tajantes sobre su comportamiento debido a que todos los días se descubren nuevas cosas acerca de la pandemia y que sorprenden a la comunidad científica.

Eso fue lo que sucedió este jueves, al darse a conocer que se identificó una nueva forma de contagio entre personas que no había sido considerada hasta el día de hoy: las lágrimas.

Según investigadores del Imi Spallanzani de Roma (Italia), se encontraron rastros de coronavirus dentro de las lágrimas de un paciente activo y potencialmente infeccioso, donde sus secreciones oculares tenían componentes para contagiar.

El estudio fue publicado en la prestigiosa revista 'Annals of Internal Medicine', donde los expertos utilizaron un hisopo ocular a los tres días de hospitalización de un paciente infectado, persona que también sufría de conjuntivitis bilateral.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recibió toda esta información antes de ser publicada, por lo que sus expertos ya trabajan en nuevas normas de cuidado y nuevos protocolos.

"Se necesitarán más estudios para verificar cuánto tiempo el virus continúa activo y potencialmente infeccioso en las lágrimas. El análisis molecular detecta solo la presencia de ARN viral en la muestra y sólo el aislamiento del virus en un cultivo celular puede demostrar su capacidad infecciosa", señaló la comunidad científica.