La editora de asuntos de China de la BBC, Carrie Gracie, decidió renunciar a su cargo en la empresa, luego de denunciar una desigualdad de salario frente al de sus colegas masculinos durante uno de los programas emblemáticos de la BBC Today.

La galardonada periodista sentenció que hoy "hay una profunda sed de lograr pagos equitativos, justos y transparentes", y anunció que regresará a un puesto en la redacción de televisión, "donde espero que me paguen igual". Sin embargo, agradeció el apoyo de sus colegas, parlamentarios y espectadores.

Por su parte, desde la BBC aclararon que "no hay una discriminación sistémica contra las mujeres", pese a que durante el año pasado, la cadena fue forzada a publicar el salario de sus empleados que ganaban por encima de US$200.000 al año. El informe dejó en evidencia que los hombres ganaban un promedio de 9,3% más que las mujeres.

No obstante, dado que la diferencia promedio en la brecha de género es de 18% en el Reino Unido, el director general de la BBC, Tony Hall, señaló que "es un mejor lugar que otras organizaciones" y se comprometió a terminarla para 2020.

En una carta abierta publicada el pasado domingo, la Carrie Gracie acusó a la empresa de mantener "una cultura de pagos secreta e ilegal". Tras más de 30 años de trabajo en la BBC, aseguró que la cadena enfrenta una "crisis de confianza" luego de que se filtrara que dos terceras partes de su estrellas -con los sueldos más altos- eran hombres.

"La BBC les pertenece a ustedes, los que pagan la licencia (una tarifa obligatoria que financia la institución). Creo que tienen derecho a saber que están violando las leyes de igualdad y resistiendo la presión para tener una estructura salarial justa y transparente", argumentó.

A través de un comunicado, un vocero de la BBC sentenció que "es vital" la igualdad de pago en la Corporación: "Un número significativo de organizaciones han publicado sus cifras de salario según género y muestran que nosotros estamos bastante mejor, por debajo del promedio nacional", se defendieron.