Tras las resoluciones que tome el Tribunal Constitucional en torno al proyecto que despenaliza el aborto en tres causales, el Gobierno se prepara para dar su última batalla valórica: El matrimonio igualitario.

El diario La Tercera reveló parte del borrador de este proyecto de ley que será enviado al Congreso el próximo 28 de agosto, luego de continuas reuniones con organizaciones de diversidad sexual a través de la Segpres y la Segegob, las que se vienen desarrollando desde mediados del año 2016.

A cargo de su diseño estuvieron las carteras de Justicia, Mujer y Equidad de Género y la propia Secretaría General de Gobierno, quienes recibieron el anteproyecto presentado por los profesores de Derecho Civil de la Universidad de Chile, Gabriel Hernández, Fabiola Lathrop y Mauricio Tapia, que elaboraron junto a la Fundación Iguales.

Este documento no solo reconocía el derecho a contraer matrimonio en términos igualitarios, en conformidad al principio de no discriminación al derecho de vida familiar. También regulaba los efectos patrimoniales, acceso a la paternidad/maternidad en igualdad de condiciones, la adopción y las técnicas de reproducción asistida.

Sin embargo, el rotativo nacional asegura que el Gobierno optó por dejar de lado esta propuesta y apostar por un cambio menos integral y complejo del Código Civil. Es decir, una fórmula que asegura el matrimonio de personas del mismo sexo, pero dejar un vacío en aspectos de filiación de dichas parejas.

En concreto, existirá un modificación evidente del artículo 102 del Código Civil que hoy sólo permite matrimonios entre personas de distinto sexo. La frase del Registro Civil que definía el matrimonio como "un contrato solemne por el cual un hombre y una mujer se unen actual e indisolublemente" cambia a "el matrimonio es un contrato solemne por el cual dos personas, de igual o distinto sexo, se unen actual e indisolublemente".

Por otro lado, el artículo 41 de este cuerpo legal, que impide la filiación homoparental ya que solamente se concibe una filiación materna y paterna, se la jugará por modificar esta norma para darle la posibilidad a un niño de tener dos padres o dos madres.

De este modo, su modificación impactará en materias como el consentimiento de menores de 18 y mayores de 16 años. También cambiará "la patria potestad" que podrá ser ejercida por padres o madres, en plural. También influirá en la reproducción asistida entre personas del mismo sexo que permitirá determinar la filiación del hijo, aunque se trate de dos padres o dos madres.

Respecto a la adopción homoparental, el Gobierno fue más sutil y modificará el artículo 126 de la siguiente manera: "En caso de que la adopción sea entre dos personas del mismo sexo, antes de dictar sentencia, el juez requerirá a los adoptantes su acuerdo para disponer el orden de los apellidos". Sin embargo, no profundiza en cómo, de qué forma y bajo qué procesos.