Atacama celebra el reconocimiento oficial de su tercer humedal, la desembocadura del Río Huasco: 260 hectáreas protegidas
Con más de 150 especies de aves registradas y un rol clave en la regulación hídrica del norte del país, la desembocadura del Río Huasco fue declarada oficialmente Humedal Urbano, incorporándose al sistema de protección ambiental nacional.
La medida, formalizada tras su publicación en el Diario Oficial, convierte a este ecosistema en el humedal urbano número 140 de Chile, bajo el amparo de la Ley 21.202.
El reconocimiento protege una superficie superior a 260 hectáreas en la comuna de Huasco, hábitat de especies como el cisne coscoroba, la garza cuca, el pato gargantillo, el pato colorado, el pilpilén común, el zarapito y el playero de Baird.
"El humedal concentra una gran cantidad de avifauna, muchas de ellas migratorias. Es por esto que estamos muy contentos de resguardarlo entregando protección y gestión posterior de la mano del municipio de Huasco", sostuvo la Seremi del Medio ambiente de Atacama, Natalia Penroz.
Por su parte, la ministra de Medio Ambiente, Maisa Rojas, valoró el reconocimiento que se le entrega a este paisaje natural: "estamos muy orgullosos de celebrar la declaración, el primero de la comuna de Huasco".
Con ello, la comuna de Huasco logra una hazaña: contar con el primer humedal urbano protegido por ley, sumando el tercero a lista de los registrados en la Región de Atacama.
Finalmente, Juan Pablo Espinoza, presidente de la Junta de Vigilancia del Río Huasco, aprovechó el reconocimiento para presionar en torno al financiamiento de la mantención de estos paisajes naturales.
"Creo sinceramente que las declaraciones están completas siempre y cuando se encuentre desarrollado y financiado el plan de mantenimiento de estas declaraciones", afirmó.
Lo anterior, en vista de a los problemas locales como la barrera de arena en la desembocadura del río, que interrumpe el ciclo hidrológico superficial y favorece la proliferación de vectores voladores, con eventuales efectos en la salud y calidad de vida de la población.
¿Por qué es importante proteger humedales?
Los humedales cumplen funciones estratégicas para la conservación de la biodiversidad, la mitigación de impactos asociados al desarrollo urbano y productivo, y la adaptación al cambio climático.
En concreto, ayudan a controlar inundaciones, purificar el agua, recargar las aguas subterráneas, proveer de agua dulce a los sectores de pesca, contribuir a la producción de aire húmedo y constituirse como el hábitat de innumerables especies.
En total, a nivel nacional ya son 16 mil hectáreas de humedales urbanos resguardados a nivel país.
