
¿Los Molles se urbaniza? Balneario amenazado por loteo en la playa y condominio de 195 departamentos
Lo que era un pequeño poblado costero en el norte de la región de Valparaíso está sufriendo la presión de convertirse en un urbanizado balneario. Se trata de Los Molles, donde vecinos y autoridades locales luchan a contrarreloj por frenar la construcción de edificios sobre ecosistemas costeros como el humedal y la playa.
La última alerta ocurrió cuando organizaciones locales denunciaron que se había subdividido en varios lotes un terreno privado que está prácticamente en la arena de la playa, y sobre un sector que está en disputa para declararse como humedal urbano.
Esta subdivisión esta justo al lado de otros dos proyectos inmobiliarios, ubicados en el corazón del terreno postulado por la Municipalidad de La Ligua como humedal urbano. Uno de ellos ya está construido y genera controversia cuando hay marejadas, ya que la calle de acceso al edificio queda inundada.

El otro proyecto es un condominio de seis pisos y 195 departamentos que quedó a medio construir en 2022, luego de que el Tribunal Ambiental dictara una medida cautelar que prohíbe subdivisiones prediales y construcciones en el terreno hasta que no termine el proceso de delimitación del humedal urbano.
Amenaza a la playa
Pero no es solo el humedal costero el que está presionado por la actividad inmobiliaria, sino la playa de Los Molles. Según un estudio del Observatorio de la Costa de la Universidad Católica, esta es una de las playas que se están erosionando más rápido en el país, con riesgo de desaparecer en la próxima década.
La investigadora que dirige el centro, Carolina Martínez, explica que la intensa urbanización sobre ecosistemas costeros y la intervención de los ríos y esteros que desembocan en las playas aceleran esta erosión, al bloquear el flujo natural de sedimentos a la playa y reducir el control natural que ejerce la arena, las dunas y los humedales contra las marejadas.
En el caso de Los Molles también está en disputa la delimitación de la línea de más alta marea, que determina a su vez hasta donde pueden llegar las construcciones cercanas a la playa. La línea que rige actualmente se dictó en el 2002 y no se condice con la realidad actual.
“Esta línea actualmente está todo el día bajo el agua, cuando en teoría solo debería mojarse cuando está la marea más alta”, describe el Director de Obras Municipales (DOM), Alfredo Hoffstadt.
En los últimos días, y a raíz de la controversia generada por la subdivisión y loteo de un terreno a pocos metros del mar, desde la Municipalidad han declarado que a fin de marzo comenzarán junto a la Armada un nuevo proceso para volver a delimitar esta línea de alta marea.
Problema del agua potable
El otro problema de Los Molles, según denuncian sus vecinos, es que cada verano al multiplicarse la población debido a la ocupación de los edificios y de otros loteos, la planta de tratamientos de la empresa sanitaria se satura, y se contamina el humedal generando la muerte masiva de peces.
La sanitaria que entrega agua potable a la zona, Aguas de San Isidro, ha sido investigada en distintas regiones por irregularidades y daños ambientales. Para la localidad de Los Molles, la Superintendencia de Servicios Sanitarios (SISS) abrió un expediente para caducar la concesión de la empresa luego de constatar recurrentes suspensiones al suministro de agua y deficiencias en la calidad del servicio.