Este jueves, el gobierno anunció, a través de la Subsecretaría de Telecomunicaciones (Subtel), la implementación obligatoria del prefijo 809 para identificar llamadas no consentidas que realizan las empresas con fines comerciales, medida que busca combatir la práctica de spam telefónico que afecta a millones de chilenos.

Este prefijo tiene por objetivo identificar las llamadas masivas y/o automatizadas no solicitadas, como servicios complementarios, asignándole una numeración especial a cada categoría.

Chile lidera ránking mundial de spam telefónico

La Subtel además dio a conocer que Chile, de acuerdo al ránking elaborado por Global Call Threat Report, es el segundo país del mundo que más spam telefónico se hace, sólo superado por Brasil.

“En promedio, cada persona recibe 23 llamadas spam mensuales en nuestro país, mientras que en el gigante sudamericano la cifra llega a 26”, precisaron.

Con esta normativa, se busca diferenciar las llamadas comerciales solicitadas, de las que uno no pidió recibir y que siempre son ofreciendo servicios que uno no quiere o necesita.

La manera de diferenciarlas será la siguiente:

• Llamadas comerciales solicitadas: Prefijo 600

• Spam telefónico: Prefijo 809.

“Con la asignación de esta numeración, los usuarios tendrán la certeza de que la llamada recibida corresponde a una de carácter masivo, solicitada o no, y que no corresponde a otro tipo de llamada que eventualmente pueden ser fraudulentas o engañosas”, cerró Subtel.

Finalmente, se obligará a las empresas a devolver las numeraciones telefónicas que usan para las televentas mediante llamados masivos. Esto debería ser en un máximo de 6 meses.