
"No tengo plata": Las 6 excusas más comunes que dan los deudores para no pagar pensiones alimenticias
Mientras miles de madres enfrentan el complejo laberinto judicial para cobrar pensiones alimenticias adeudadas, los deudores continúan evadiendo su responsabilidad parental con diversas justificaciones. El no pago de la pensión alimenticia es reconocido como una conducta de violencia intrafamiliar según la ley del Registro de Deudores.
"Es un factor de manipulación importante que utilizan muchos, no todos ni la mayoría, de los hombres en contra de las mujeres para manipular y hacer que ellas hagan lo que él estima conveniente", explica un consejero técnico de los tribunales de familia de Santiago, consultado por El Desconcierto.
La psicóloga Bárbara Porter, experta que ha participado en varias discusiones legislativas sobre familia, señala que "puede ser que ya no vivan bajo la misma casa, que el hombre ya no la golpee o no la insulte directamente. Pero una manera de seguir ejerciendo violencia es la violencia económica, que es el no pago de pensión de alimentos, es por ejemplo pagar menos, pagar a veces o derechamente no pagar".
¿Cuáles son las excusas más comunes para no pagar la pensión alimenticia?
La primera y más frecuente excusa que utilizan los deudores es alegar que "no tienen plata". Si bien algunos enfrentan dificultades económicas reales, el problema es transversal a todas las clases sociales.
La ley establece que la pensión de alimentos siempre será proporcional a la situación económica del padre, con un monto mínimo base actual de 204.200 pesos. Sin embargo, aunque el alimentante se encuentre sin recursos, "se presume que puede pagar el mínimo legal", según indica la abogada Ingrid Villena.
La segunda excusa común es "estoy cesante". Muchos padres renuncian a sus empleos formales para trabajar de manera independiente o a honorarios, dificultando el cobro.
Carola, una madre a cuya hija le deben pensión relata que "en la mediación, el caca siempre va a decir que no trabaja y así se meta cien copas al mes, se va a poner como víctima".
Una tercera justificación es que "es mucha plata". Según recuerda Daniela, joven madre de Puente Alto, su ex le manifestaba constantemente que "no les alcanzaba, que me iba a dar después, que después se arreglaba, después, después, después... siempre después".
Esta percepción muchas veces se debe a que los deudores interpretan el concepto de "alimentos" de forma literal, pensando que solo cubre la comida de los hijos.
La cuarta excusa común es afirmar que "la mamá se gasta la plata en ella". La abogada Úrsula Kiwi explica que muchos deudores "sienten como que es un favor para la mujer y no para los niños, y no se dan cuenta que esa pensión va destinada a los menores, pero piensan que va destinada a la mamá".
Por su parte, la abogada de familia Daniela Melillanca, enfatiza que "hay un mal concepto de la pensión de alimentos y de eso nos tenemos que preocupar de corregir. La pensión de alimentos no se le debe a las madres, se le debe a los hijos e hijas".
La quinta justificación es que "la mamá tiene otra pareja", como si la nueva relación eliminara la obligación del padre biológico. El consejero técnico consultado por El Desconcierto ha sido testigo de padres que no pagan por esta razón: "Lo que ellos opinan es que le están pagando también la pensión de alimento a la pareja, lo cual va inserto dentro del machismo acérrimo".
Finalmente, la sexta excusa es exigir "que la mamá trabaje", ignorando las brechas de género en el ámbito laboral y la sobrecarga de responsabilidades que asumen las mujeres.
¿Por qué fallan las sanciones contra los deudores de pensiones alimenticias?
A pesar de las sanciones establecidas en la Ley del Registro de Deudores, como la retención de la devolución de impuestos, la prohibición de comprar o vender vehículos y bienes inmuebles, o la imposibilidad de renovar la licencia de conducir y el pasaporte, muchos deudores continúan evadiendo su responsabilidad.
La abogada de familia Nickol Ortiz cuestiona la efectividad de estas medidas: "En un país en donde habitan ciudadanos que viven en un constante estado de morosidad, el Registro Nacional de Deudores es como el gran castigo que tienen, pero en verdad, no sé si es tan efectivo porque en Chile ¿cuántas personas son morosas y siguen con su vida normal?".
En este contexto, Ortiz sugiere crear "mecanismos de persecución más efectivos", como la prohibición de "ingresar a los estadios o no comprar bebidas alcohólicas", por ejemplo.
Para 2024, la Tesorería General de la República retuvo la devolución de impuestos a 9.992 contribuyentes por un monto de 1.574 millones de pesos, cifra que se cuadruplicó en comparación a la retención del año 2023. Sin embargo, algunos deudores evitan hacer su declaración de impuestos para eludir esta sanción.
La orden de arresto, que sigue siendo un apremio vigente, rara vez se cumple debido a la sobrecarga del sistema judicial y policial.
El problema principal, según especialistas, es que "da la sensación que ponen en última prioridad, o no es su primera prioridad, el pago de la pensión, porque todos esos hombres comen, salen, hacen su vida normal, pero no les alcanza para pagar la pensión porque no es su prioridad", concluye la abogada Úrsula Kiwi.