
Hoy se celebra el Día Mundial de la Energía: Compromisos y acciones por la sostenibilidad
No solo hoy es el Día de los Enamorados, sino que también es el Día Mundial de la Energía, tal vez no muy conocido, pero sí muy importante para el desarrollo de la sociedad y la calidad de vida de los habitantes del planeta.
Esta efeméride, instaurada por la ONU en 1949, tiene el propósito de distinguir el uso eficiente del recurso y la necesidad de transformar las matrices energéticas de los países, pasando de fuentes tradicionalmente basadas en combustibles fósiles como el petróleo, el carbón o el gas, a las energías renovables, como la solar, eólica, hidráulica, geotérmica, biomasa y la producida por la fuerza del mar.
Ciertamente, una oportunidad para promover la búsqueda de alternativas para un futuro más sostenible.
Energía omnipresente
La energía está presente en nuestro diario vivir y nos acompaña donde quiera que vayamos: en la luz que ilumina las calles, ventiladores y aires acondicionados de nuestros hogares y lugares de trabajo, también en el transporte y en el movimiento de mercancías por aire, mar o tierra, además, sin ella no podríamos preparar alimentos, cargar nuestros dispositivos, activar nuestros primeros pasos al comenzar nuestras jornadas, entre innumerables usos, incluso resulta aún más vital para las personas electrodependientes.
Además de lo anterior, la energía también es primordial en el desarrollo y la prosperidad de un país, ya que representa un pilar fundamental para su crecimiento económico.
Objetivo ODS 7
El Objetivo de Desarrollo Sostenible 7 (ODS 7), una de las 17 metas establecidas por la ONU en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, postula garantizar el acceso a una energía asequible, segura, sostenible y moderna.
Acceso a la energía: el objetivo es favorecer la “disponibilidad física de servicios modernos de energía para satisfacer las necesidades humanas básicas, a costes asequibles y que incluyen la electricidad y equipos mejorados”.
Energía renovable: se debe promover el aumento de la proporción de energía derivada de fuentes renovables en el cómputo energético global.
Eficiencia energética: el ODS 7 también aborda la importancia de mejorar la eficiencia en todos los sectores, desde la industria hasta los hogares, para minimizar la cantidad de recursos energéticos empleados.
Sostenibilidad: se hace hincapié en la sostenibilidad en la producción y consumo de energía, promoviendo prácticas que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero y mitigar los impactos ambientales negativos.
Desarrollo sostenible: el acceso a una energía asequible y sostenible es vital para el desarrollo económico, la erradicación de la pobreza, la mejora de la salud y la educación.