Este sábado 19 de octubre entra en vigencia la nueva ley lumínica para Chile, que busca reducir la contaminación ambiental por luz, y las molestias que genera en flora, fauna y la salud de las personas, además de la contaminación del cielo nocturno que dificulta la astronomía.

La nueva ley obliga que las pantallas publicitarias y los focos de canchas y estadios deberán apagarse a la media noche y encenderse solo desde las 7 am. Además, las nuevas pantallas que se instalen en el país deberán tener un límite de emisión lumínica menor.

De luz fría a cálida

Uno de los objetivos de este proyecto es transitar desde la luz fría hacia la luz cálida, con restricción en la emisión de luz azul. Esta restricción es mayor para las Áreas de Protección Especial, que comprenden cielos de importancia astronómica, parques y reservas naturales o zonas de reproducción de ciertas especies amenazadas por la contaminación lumínica.

Todas las luces que se instalen de ahora en más en el país deberán contar con certificaciones de laboratorios autorizados por la Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC). Estos sellos certifican que las luces cumplen con los estándares de esta nueva ley.

Será la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA) la encargada de fiscalizar que se cumpla esta norma. La superintendenta Marie Claude Plumer señaló que históricamente su institución ha recibido denuncias sobre todo por la luminosidad de pantallas publicitarias, que molestan el sueño y encandilan a conductores.

Se estima que en el mundo la contaminación lumínica crece 2% al año, y que solo 1% de la población de Chile vive bajo cielos realmente oscuros. A escala mundial, se calcula que 83% de la población vive con cielos contaminados por luz.