De acuerdo a la información revelada en el Primer Informe de Equidad Empresarial y Buen Gobierno, un 35% de las empresas en Chile no cuentan con capacitación a sus trabajadores sobre el acoso laboral y sexual.

Desde el 1 de agosto de 2024 comenzará a regir la Ley Karin, normativa que sanciona una amplia cantidad de conductas que califican como acoso laboral y sexual.

El mismo informe, desarrollado por tres organizaciones, entre ellas la fundación Chile Mujeres, da cuenta de que el 12,5% de las empresas no cuenta con ninguna política de prevención en estas materias.

Frente al acoso sexual, un 32% de las empresas carece de este tipo de programas de capacitación.

Cifras preocupantes, considerando que para agosto serán 18 nuevas situaciones que calificarán para ser sancionadas como acoso laboral en la nueva legislación.

La iniciativa fue impulsada tras la muerte de la joven Karin Salgado en 2019, una técnico en enfermería que terminó con su vida debido al acoso laboral que sufrió en el Hospital Herminda Martín de Chillán.

Recomendaciones

Miguel Capurro, Director de Capital Humano de Randstad en Chile, Argentina y Uruguay, entrega una serie de recomendaciones a la empresas para sintonizar con la nueva normativa.

Primero, las organizaciones deben trabajar en políticas, protocolos e investigación del acoso laboral sexual.

La capacitación y la sensibilización debe aplicarse con perspectiva de género a todos los niveles de la empresa.

En la misma línea, es importante que los empleadores garanticen un ambiente seguro y confidencial en caso de que un trabajador quiera realizar una denuncia.

A su vez, las empresas deben ofrecer apoyo psicológico y legal para las víctimas.

La flexibilidad laboral también es una buena opción para facilitar el proceso que viven las víctimas.

Mantener una comunicación abierta y transparente por parte de los empleadores o líderes de la empresa ayudará a crear una ambiente de confianza.

Finalmente, el monitoreo y la evaluación continua permitirá garantizar efectividad de las políticas y retroalimentación a los trabajadores.