Considerando su avance en el país, y luego de que el fin de semana la Organización Mundial de la Salud (OMS) elevó al máximo su nivel de alerta por la viruela del mono, que declaró como "emergencia de salud pública de alcance internacional", en Chile las autoridades ya se activaron proyectando un empeoramiento de la situación sanitaria a nivel local.

Específicamente, la oficialización de los últimos registros, apunta a la detección de 45 casos asociados a la patología durante los últimos días.

Respecto de esta situación, la ministra de Salud, María Begoña Yarza, detalló que el Ejecutivo está "en alerta" ante el incremento de contagios a nivel internacional en las últimas semanas.

"Efectivamente, el aumento de los casos ha sido sistemático en todos los continentes. La forma y los nuevos modos en que se transmite hacen que la OMS declare esta emergencia de salud pública porque con ello lo que logramos (…) es que aquellas medidas sanitarias que se requieran, podrán dictarse de manera coordinada y vinculante", aseguró en declaraciones que reproduce Emol.

Y agregó que "esta manera de alertar a los países significa que la población debe estar más informada y los sistemas sanitarios más preparados".

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En este caso, y contrariamente a lo que sucedió con el coronavirus, la viruela del mono se propaga en momentos en que existen una fórmula farmacológica que ya se baraja para enfrentarla.

Una de ellas es la MVA-BN, desarrollada en Dinamarca, a lo que se suma la japonesa LC16 y la estadounidense ACAM2000, que fueron elaboradas para el combate de la viruela convencional, aunque todavía no existen suficientes antecedentes respecto de su eficacia y el número de dosis que se requieren para estar protegido contra la patología en expansión.

Paralelamente, ya se advirtió que una vez materializada la vacunación, las personas tardan semanas en desarrollar defensas contra la viruela del mono, a lo que se suman eventuales problemas iniciales de disponibilidad en varios países.

Con todas estas variables sobre la mesa, lo concreto es que la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (Subrei) confirmó al medio citado que ha mantenido "una coordinación interministerial periódica" con el Ministerio de Salud, para "avanzar en los diferentes aspectos relacionados al suministro y disponibilidad de vacunas, al seguimiento de los acuerdos comerciales y la información técnica sobre las nuevas versiones de vacunas COVID-19".

"Se han explorado las alternativas de vacunas para la viruela del mono disponibles a nivel internacional, tanto directamente como a través de las representaciones comerciales y embajadas de Chile en el exterior", detalló.

Paralelamente, confirmaron que "en caso de resultar sanitariamente oportuno, el Estado de Chile podrá suscribir los acuerdos de suministro para adquirir un stock de vacunas que permitan vacunar a la población objetivo que defina la autoridad sanitaria".

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