A través de una declaración, la Federación Nacional de Funcionarios del Ministerio Público, FENAMIP, señaló este viernes que “el Ministerio Público debe terminar con el sistema de castas para mejorar su gestión”.

Asimismo, la FENAMIP, hizo un llamado a los miembros de la Convención Constituyente para que aborden las diversas problemáticas que afectan al Órgano Persecutor y lleven a cabo una reforma estructural que requiere, a su juicio, el Ministerio Público.

“El funcionamiento de nuestra Institución está directamente relacionado con la calidad del acceso a la justicia para la ciudadanía, es por ello que debe someterse a controles externos y procesos de selección objetivos en todos los estamentos, sin excepción”, indicaron desde la asociación.

“Nos parece que ha llegado el momento en que se debe terminar con los cargos de confianza que tienen a su disposición el Fiscal Nacional y los Fiscales Regionales para definir los puestos directivos, y designar a las jefaturas de las Unidades Investigativas también por confianza, ya que facilita el nepotismo y prácticas reñidas con la probidad que deben primar en una institución persecutora, la cual debe ser un ejemplo de transparencia y ética para el resto de las instituciones públicas del país”, agregaron.

Según manifestó la FENAMIP, “los cargos de confianza constituyen un factor subjetivo de nombramiento para elegir a personas que toman decisiones vinculadas con la gestión de la persecución penal en nuestro país, que, además, son las rentas más elevados de nuestra Institución”.

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Por lo anterior, evalúan que se requiere con urgencia implementar un sistema de selección objetivo con oposición de antecedentes y perfiles de cargos “afines al desempeño de excelencia que requiere nuestro servicio, como la Alta Dirección Pública u otro organismo similar y externo, por ejemplo”.

La federación expresó que resulta “altamente contradictorio que, en un Organismo jerarquizado y técnico, personas designadas por confianza, sean las que tomen las decisiones operativas y administrativas, por sobre los funcionarios de carrera que han ingresado por concurso público”.

De acuerdo con los funcionarios, al interior de la organización se mantienen prácticas como la denominada “silla musical”, la que permitiría que ex Fiscales Regionales y Directivos puedan rotar entre las diferentes regiones del país, luego de terminar su período de gestión, sin concurso público, “generando una evidente distorsión a la carrera funcionaria y permitiendo que autoridades sin las competencias necesarias puedan perpetuarse indefinidamente en la Institución, sin dar prueba objetiva de su idoneidad para el cargo”.

Falta de controles externos

Así también, abordaron la propuesta de la Asociación Nacional de Fiscales, que planteó que sea el propio Consejo de Fiscales Regionales quien dé el visto bueno a estas designaciones, “en un claro intento de validar la continuidad de esta dinámica en la Institución”.

Para la FENAMIP, “esta propuesta no suma objetividad y menos ponderación del mérito personal en dichos nombramientos, sino que fomentaría la continuidad de un sistema de castas, enquistado dentro del Ministerio Público”. Lo anterior, se ha visto “favorecido por la ausencia de contrapesos y la falta de controles externos a la institución y que no estén ligados a los gobiernos de turno en nuestro país”, según los trabajadores.

“Por ello, nuestra Federación apuesta a que se definan perfiles curriculares para estos cargos tan importantes y que sean elegidos por organismos externos, y en esto convocamos a los convencionales constituyentes, a estudiar las reales reformas que requiere nuestra institución para evitar perpetuar estas malas prácticas, ya que es urgente revisar los mecanismos de nombramiento para los cargos de Fiscal Nacional y Fiscales Regionales, agregando pruebas de competencias y habilidades que son esenciales para desarrollar de manera óptima sus funciones”, añadieron.

Para finalizar, la Federación hizo un llamado a la Convención Constitucional a ser invitados a sus sesiones y escuchar sus propuestas de reformas “para lograr un Ministerio Público al servicio de la ciudadanía”.