Este miércoles se conoció que la Policía de Investigaciones (PDI) advirtió hace un año y dos meses que Felipe Rojas, ahora detenido por su presunta participación en el caso, podría estar involucrado en el asesinato de Fernanda Maciel.

El informe que arrojaba esta tesis fue presentado en abril de 2018, a dos meses de la desaparición de la joven. Esta línea de investigación fue avalada por un segundo informe de la PDI entregado a la Fiscalía Centro Norte en febrero de 2019 que sugería cambiar la calidad de Rojas de testigo a imputado.

El planteamiento de la policía se basaba en que Rojas había sido la última persona en estar con la joven antes de su desaparición, sumado a que su relato presentaba importantes inconsistencias.

Asimismo, la revisión de las cámaras de seguridad del sector no muestran a Maciel salir de la bodega, pero Rojas sí aparece. También se puede apreciar que el acusado volvió en reiteradas veces al  lugar donde fue encontrada la chica.

El documento de la PDI era claro en apuntar a que Rojas probablemente era el responsable de la muerte o testigo de un deceso accidental de la chica.

Desde el Ministerio Público han explicado que dichos informes fueron tomados en cuenta, pero que sin el hallazgo de la joven no era posible imputar cargos en contra de Rojas, que fueran más allá de una posible obstrucción a la investigación, donde finalmente el sospechoso podría haber quedado libre por falta de pruebas.

Otro informe de la PDI presentado en octubre de 2018 apuntaba en otra dirección, proponiendo la hipótesis de un posible suicidio de parte de Maciel, planteamiento que tuvo gran respaldo por un tiempo.

Este jueves finalmente se va a realizar la audiencia de formalización de cargos en contra Rojas en el Segundo Juzgado de Garantía de Santiago, donde probablemente se imputarán los delitos de homicidio, inhumación ilegal y aborto. Eso luego de que un informe del Servicio Médico Legal dijera que la causa de muerte fue por estrangulamiento.