El Partido Popular (PP) del presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, recibió un duro golpe que puede hacer estallar su mandato justo cuando había logrado superar su piedra en el talón: la aprobación de los presupuestos generales del Estado. El PP fue condenado este jueves por beneficiarse de una trama de “financiamiento ilegal” en una de las aristas del caso Gürtel. La resolución de la Audiencia Nacional (AN) penaliza, como entidad jurídica, al PP con el pago de 245.492 euros (US$ 287.827) por haberse beneficiado económicamente del llamado “caso Gürtel”, algo que el partido niega haber tenido conocimiento. Además de la condena a su propio partido como tal, que el presidente ya anunció que recurrirán, en la causa también fueron condenadas 29 personas, entre ellas el ex tesorero del Partido Popular, Luis Bárcenas a 33 años de prisión; a su esposa, a 15 años; y al mismo Correa, a 51 años de cárcel.También la exministra de Salud, Ana Mato, que se benefició con regalos, fue sentenciada a pagar 27.857 euros (US$ 32.660). Se trata de la primera condena a un partido político como responsable civil en el lucro obtenido por una trama de corrupción.

En 2007 la fiscalía comenzó a investigar una denuncia sobre una red de corrupción política vinculada al PP, que funcionaba principalmente en las comunidades de Madrid y Valencia entre los años 1999 y 2005. La trama estaba encabezada por el empresario Francisco Correa, quien estuvo en prisión preventiva bajo la acusación de haber cometido supuestamente los delitos de cohecho, tráfico de influencias, blanqueo de capitales, fraude fiscal, asociación ilícita y falsificación de documentos.

La investigación del caso llevó a Rajoy a tener que declarar como testigo del caso en julio del año pasado, cuando negó la existencia de una caja b en el partido (recursos que permitían manejar las platas sin fiscalización)  y el cobro de sobresueldos. Sin embargo, en la sentencia los magistrados señalaron que las pruebas sobre la caja b son tan “contundentes” que los testimonios de Rajoy y sus compañeros de partido no parecen lo “suficiente verosímil” para rebatirlas.

Moción de censura

La sentencia provocó la reacción de todos los partidos políticos del país. El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) presentó este viernes una moción de censura a la que Podemos de Pablo Iglesias ya anunció su apoyo. Lo mismo que acordaron los independentistas catalanes. Por su parte, Ciudadanos, el principal socio del PP en el gobierno advirtió de que se replanteará su apoyo durante el resto de la legislatura y llamó a convocar nuevas elecciones. Los nacionalistas vascos son los que tendrán que decidir si apuestan por la continuidad de Rajoy o facilitan un cambio de gobierno a favor de los socialistas y de su líder, Pedro Sánchez.

Ante el anuncio de los socialistas, Rajoy aseguró que no hay razones para intentar tumbar a su gobierno y rechazó que la sentencia del caso Gürtel sea razón suficiente para impulsar la votación. “La moción va contra la estabilidad, tan necesaria hoy; perjudica la recuperación económica, basta con ver cómo está evolucionando la Bolsa y la prima de riesgo; es mala para España, y es lesiva para el futuro de todos los ciudadanos”, dijo el mandatario. Sobre la propuesta de Ciudadanos, Rajoy contestó a que convocar las elecciones es su facultad, y que quiere apurar la legislatura hasta 2020.

A un año de las elecciones municipales, regionales y europeas de mayo de 2019, la condena por el caso “Gürtel” es un duro golpe para Mariano Rajoy, en minoría en el Congreso español.

Sin Champions

La sentencia del caso Gürtel y la crisis política abierta en el país ha complicado a Mariano Rajoy incluso en lo más trivial. El presidente español no podrá viajar a Kíev (Ucrania) para asistir a la final de la Champions que disputarán este sábado el Real Madrid y el Liverpool. Tras conocerse la sentencia y abrirse el incierto escenario político que amenaza a su gobierno, el mandatario decidió no viajar y quedarse en España.