Harvey Weinstein culpable de agresión sexual: Cuántos años de cárcel arriesga y qué otros cargos tiene en su contra
En un giro judicial cargado de tensión y controversia, el productor de cine Harvey Weinstein fue declarado culpable este miércoles de agresión sexual en primer grado contra Miriam Haley, una antigua asistente de producción que lo acusó de haberle practicado sexo oral por la fuerza en 2006.
El veredicto fue entregado por un jurado popular en el Tribunal Supremo del estado de Nueva York, donde Weinstein podría enfrentar hasta 25 años de prisión por este delito.
¿Qué otros cargos tiene Weinstein en su contra?
Durante el juicio, que estuvo marcado por la intensidad emocional y el caos en la sala, el jurado también absolvió a Weinstein de otro cargo de agresión sexual en primer grado vinculado a la modelo Kaja Sokola.
A su vez, las deliberaciones continuarán este jueves para definir el destino del tercer cargo pendiente: violación en tercer grado, relacionado con un presunto abuso cometido en 2013 contra la actriz Jessica Mann.
Este delito, aunque sin componente de fuerza, conlleva una pena máxima de cuatro años.
¿Hubo amenazad por el veredicto?
El proceso judicial estuvo lejos de desarrollarse en calma. Momentos antes de que se dieran a conocer los primeros veredictos, el presidente del jurado solicitó hablar con el juez Curtis Farber en privado, denunciando haber sido amenazado por otro miembro del jurado.
“No puedo volver allí con los demás jurados”, declaró, asegurando que incluso se estaban discutiendo asuntos no incluidos formalmente en el juicio.
Durante esa reunión a puertas cerradas con fiscales y abogados -sin la presencia de Weinstein-, el juez Farber reveló que el jurado estaba dividido, con al menos un integrante presionando a otros y emitiendo amenazas como: “te veré afuera en algún momento”.
Esta situación, según el magistrado, era “atípica pero no inédita en un juicio complejo”.
La defensa del productor, encabezada por el abogado Arthur Aidala, aprovechó el tenso momento para exigir la nulidad del juicio, acusando al juez de no intervenir adecuadamente en los episodios de intimidación.
“Usted debe representar al estado de Nueva York y está permitiendo esto”, reclamó Aidala, sin éxito. Pero, Farber rechazó la solicitud, afirmando que no permitiría que se vulneraran los derechos de ninguna de las partes, pero subrayó que “es normal que pasen estas cosas en un proceso que no es prototípico”.
Visiblemente alterado, Weinstein se dirigió a viva voz al tribunal para protestar por lo que consideró un proceso injusto.
“Lo que está ocurriendo en esa sala de deliberación no tiene nada que ver con el juicio. No estoy teniendo un juicio justo. Es tiempo de acabar esto, encontrar un jurado diferente sin peleas ni amenazas, y comenzar un nuevo juicio”, reclamó desde su silla de ruedas, donde ha permanecido la mayor parte del juicio debido a problemas cardíacos y un diagnóstico de leucemia.
