
Mejor iluminación y agua caliente: Estudiantes de 8 escuelas rurales de La Araucanía obtienen soluciones energéticas
El Ministerio de Energía está cambiando la realidad de estudiantes de ocho escuelas rurales de La Araucanía, esto, gracias a nuevas instalaciones eléctricas certificadas que están en línea con los más altos estándares chilenos de seguridad y calidad, luces de emergencia para cada sala, mejor iluminación y, en algunos casos, agua caliente sanitaria producida por sistemas térmicos solares.
Estas mejoras son propulsadas por el programa Escuelas Rurales de la División de Acceso y Desarrollo Social del Ministerio de Energía, y fueron inauguradas justamente para el comienzo del año pedagógico, generando un entorno y espacios más seguros y cómodos para las jornadas de aprendizaje.
Escuelas beneficiadas
Entre los establecimientos beneficiados está la Escuela Rucatraro Alto en Galvarino y la Escuela Conoco Chico en Temuco; Inés de Suárez y Nueva Aurora en Chol Chol; Chiguaihue en Collipulli y Buta Rincón, en Lumaco, donde alumnos y alumnas ya pueden experimentar estas novedosas prestaciones.
Sumado a esto, próximamente tendrá lugar la inauguración de los trabajos en la Escuela Arenas Blancas, ubicada en Nueva Imperial y Escuela Triftrifco en Galvarino, dando por finalizada esta etapa de optimizaciones energéticas en la región.
Bienestar educativo
El Seremi de Energía de La Araucanía, Camilo Villagrán, valoró el impacto de estas iniciativas, expresando que “mediante el programa Escuelas Rurales, estamos llevando bienestar a nuestras comunidades educativas. Estas mejoras no solo optimizan las condiciones de estudio, sino que también reflejan nuestro compromiso con la sostenibilidad y la seguridad. Es un cambio real en la vida de estos niños y niñas, que ahora cuentan con espacios más adecuados para aprender y desarrollarse. En cada escuela se colocó una placa, que conmemora el avance otorgado a la comunidad educativa”.
Dichas obras forman parte de un esfuerzo continuo por mejorar la calidad de vida en zonas rurales, integrando soluciones energéticas modernas y eficientes que benefician tanto a los estudiantes como a sus comunidades. Con este progreso, La Araucanía avanza firme hacia una educación más equitativa y sostenible.