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Antártica podría ser una “bomba” para el planeta: Alertan que reservas de gas metano están emanando a la superficie
Ocultas bajo los hielos de la Antártica existen enormes cantidades de gas metano. Pero a raíz del calentamiento del océano y el derretimiento de la capa de hielo, el continente blanco se estaría levantando, propiciando escapes de este gas helado.
Así lo describe un estudio de investigadores españoles, que cruzaron desde Punta Arenas a la Antártica, para analizar cómo estaban respondiendo estos depósitos de gas en estado sólido, al derretimiento glaciar en el extremo sur del planeta.
Allí, confirmaron la existencia de filtraciones de metano y encontraron columnas de metano de 700 metros de altura y 70 metros de ancho en el lecho marino. Los investigadores estiman que en la zona hay 24 gigatoneladas de carbono acumuladas en los hidratos de metano.
Esta cantidad de gases de efecto invernadero equivaldría a lo que emite toda la humanidad en dos años, señalan. Se cree que este gas helado se acumuló en el fondo marino antártico durante la última glaciación, hace 20 mil años.
El metano es un gas de efecto invernadero que permanece menos tiempo en la atmósfera con respecto al dióxido de carbono, pero con una capacidad de calentamiento hasta 40 veces mayor. Científicos del mundo han cuestionado el uso del gas natural como un combustible más limpio que el petróleo, debido a que en los sistemas de abastecimiento se suelen generar fugas de metano.
El gas metano también emana de los residuos orgánicos en descomposición, que se acumulan en los vertederos y basurales del mundo entero. Otra fuente importante de metano es la actividad agrícola, a través del estiércol y los eructos de las vacas.