Mientras la Comisión de Hacienda en el Senado recibía al Consejo Autónomo Fiscal para recibir el informe técnico del organismo respecto a la reforma de pensiones, la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, se encontraba al otro lado del Congreso Nacional, en la Cámara de Diputados, reunida con los jefes de bancadas del oficialismo.

La intención de la ministra era tantear el terreno que pisará la reforma la próxima semana cuando el proyecto pase del Senado a la Cámara de Diputados. Esto, en el contexto de que voces del oficialismo —especialmente del Frente Amplio— han anunciado que buscarán introducir modificaciones a la iniciativa luego de que en el acuerdo fraguado en la Cámara Alta no se considerara la separación de la industria, medida que conlleva el fin del sistema de AFP. 

Al constatar que no había piso para la medida, el Ejecutivo optó por introducir indicaciones que apuntan más bien a “reorganizar” la industria. 

No obstante, la bancada de diputados del FA ya había fijado como línea roja que la reforma contuviera la separación de la industria. Por lo mismo, en la bancada apuestan a rechazar ciertas indicaciones para forzar una comisión mixta, última instancia de tramitación en caso de que no se logre un apoyo mayoritario en ambas cámaras. 

Esta situación generó molestia en el resto del oficialismo ya que la ministra Jara instó a las bancadas oficialistas a aprobar el proyecto con el fin de que se promulgue a la brevedad, cosa con que el FA está en desacuerdo.

Sin embargo, la posición del FA dio un giro drástico durante la tarde de este jueves. Desde el hall de la Cámara, denominado El Pensador, la bancada frenteamplista reculó en sus críticas y anunció su apoyo al proyecto. 

“Como bancada del FA estamos priorizando que los beneficios del seguro social se paguen cuanto antes. Los compromisos en este proyecto de ley, como estaba pensado, el día viernes de la Cámara, el seguro social se comienza a pagar en octubre. No queremos más dilaciones”, explicó la diputada Gael Yeomans sobre el cambio de postura de la bancada. 

Paralelamente, la bancada compartió un comunicado donde señala que “si bien este proyecto no es perfecto, permite avances importantes como la creación del seguro social, reducir la brecha entre hombres y mujeres y aumentar la Pensión Garantizada Universal (PGU)”. En ese sentido, se confirmó que “como bancada parlamentaria del Frente Amplio aprobaremos la Reforma de Pensiones, dado que este proyecto representa un avance necesario para mejorar las condiciones de vida de miles de jubilados”. 

Fuentes de gobierno y oficialismo aseguran a El Desconcierto que habría sido el mismo Presidente Gabriel Boric el encargado de alinear la bancada frenteamplista de cara a la tramitación en la Cámara.

Según las mismas fuentes, el mandatario se puso en contacto con la presidenta del partido, Constanza Martínez, para “bajar” el mensaje a la bancada de diputados, lo que finalmente terminó decantando en que la bancada respaldara la reforma. 

Oficialismo alineado con reforma

De todas formas, hoy en la reunión de jefes de bancada se abordó la situación. En la cita —de cuál fueron partes todos los jefes de bancada del oficialismo más la DC y el ministro de la Segpres, Álvaro Elizalde— la ministra Jara se encargó de informar cómo avanza el proyecto en el Senado y aprovechó de tantear las distintas posiciones que existen en la coalición de gobierno. 

En esa instancia, dicen fuentes que concurrieron, hubo diversas posturas: desde quiénes expresaron su apoyo irrestricto al proyecto, como quienes manifestaron que el proyecto aún tiene espacio para perfeccionarse. 

Consultado por El Desconcierto, el jefe de bancada de diputados PS, Daniel Melo, señala que los socialistas ya tomaron una determinación: apoyar el acuerdo y votar a favor sin mediar nuevas indicaciones. 

“La bancada de manera colectiva el día de hoy tomó la definición que mayoritariamente va a respaldar la reforma del sistema de pensiones. Y eso es una señal clara también de marcar un camino, porque nos interesa que las pensiones de los actuales jubilados mejoren de manera sustancial y también para los futuros trabajadores y trabajadoras que se den a pensiones. Por lo tanto, nuestros votos mayoritariamente van a estar a favor y creemos que además esto debería ir acompañado también de las otras fuerzas políticas que son parte del gobierno”, advierte Melo. 

En la bancada de Independientes-PPD, sin embargo, siguen molestos por el resultado del acuerdo. El año pasado, mientras se negociaba la reforma en la Cámara, la ministra Jara habría firmado un compromiso para rebajar la tabla de mortalidad lo que finalmente no contempló el proyecto. Por lo mismo, desde la bancada advierten que esto será un punto que esperan reponer. 

Requerida por El Desconcierto, la jefa de bancada del sector, Camila Musante, advierte que “si el gobierno quiere que esto salga de buena manera y triunfe, que también es lo que esperan muchos jubilados y jubiladas en Chile, lo que esperamos es que no cometan el error de sostener diálogos solo con algunas bancadas del oficialismo”, en referencia a la presión que ha ejercido el FA. 

La advertencia (y resignación) de Jara

La situación fue advertida por la misma Jara que adelantó que ese escenario podría terminar “truncando” el éxito de la reforma. 

“Si hay una comisión mixta (...) Es bien probable que lo que aquí ocurra es que esta discusión pase para marzo. Si esta discusión pasa para marzo y se conforma una comisión mixta, hay que ser sumamente transparente en esto; el oficialismo y la oposición están empatados. No es que alguna de las dos fuerzas políticas tenga mayoría”, afirmó la ministra. 

Ante ese posible escenario, Jara advirtió que “tiendo a creer que en vez de contribuir, ese camino podría terminar deteniendo nuevamente la reforma previsional”. 

Sumado a la eventual comisión mixta, hoy surgió otro problema para el Ejecutivo en su intención de sacar adelante la reforma en enero. Según dio cuenta la presidenta de la Cámara de Diputados, Karol Cariola, el Senado no estaría logrando aprobar la reforma en los tiempos previstos, por lo que no podría comenzar a tramitarse la reforma durante el sábado, día extraordinario que acordó la Cámara para sesionar. 

“Entendemos que todavía el Senado, a pesar del acuerdo que tienen, no tiene claridad de cuáles van a ser los tiempos que se van a tomar definitivamente”, sostuvo Cariola, advirtiendo que la situación “complica como Cámara, porque estamos en una situación absolutamente desventajosa respecto del control de los tiempos y evidentemente necesitamos poder dar certezas”.