Síntomas como taquicardia o desvanecimientos son algunas de las consecuencias que pueden llegar a experimentar los adultos mayores al exponerse al sol, sin embargo, el doctor Juan Carlos Molina, geriatra de Clínica MEDS, entrega una serie de sugerencias para protegerlos de las altas temperaturas.

Algunas de los síntomas de la hipertermia son pérdida de consciencia, llegar al sopor, taquicardia, hipotensión, sudoración excesiva, indica el especialista.

Lo primero que sugiere el experto es evitar exponerlos al sol entre las 11:00 a las 17:00 horas, y en caso de salir, lo mejor es que utilicen ropa adecuada de colores claros, debido a que el negro absorbe los rayos de luz solar.

En cuanto a la piel, es fundamental el uso de bloqueador factor mayor a 30, el uso de un sombrero y mantener una buena hidratación, permitiendo reducir el peligro tras las altas temperaturas.

Nunca está demás llevar un botella con agua, ya que el calor genera una sensación de sed en las personas, provocando que la piel se adelgace.

Lo recomendable es consumir dos litros al día, incluso si no hay sed, "salvo que tengan problemas de insuficiencia cardiaca", indica.

Si se camina por la calle, lo ideal es hacerlo en lugares con sombra para una mayor ventilación.

La hipertermia se da cuando las arterias se dilatan debido al calor provocando menos bombardeo en la sangre, y en consecuencia, llega en menor intensidad al cerebro.

Este efecto puede provocar un desmayo en la persona, caída que puede generar una fractura o un golpe en la cabeza, indica el especialista.

Para atender estas emergencias, es fundamental llamar primero a primeros auxilios o a una ambulancia.

Mientras se espera por la ayuda, lo recomendable es poner paños húmedos en "aquellas zonas donde los pliegues arteriales están más a la superficie: cuello, axila e ingle", explica Molina.

Finalmente, "hay que sacar del lugar de calor a esa persona y buscar lugares más frescos. Dar agua y siempre estar atentos al estado de conciencia del paciente”.