Siete puntos cayó la alcaldesa de Providencia y abanderada presidencial de la UDI, Evelyn Matthei, en la última entrega de Plaza Pública de Cadem que mide las preferencias de cara a la presidencial de 2025. 

Si en septiembre la jefa comunal marcaba 26 puntos en el sondeo, en la segunda semana de octubre apenas alcanzó los 19 que, en todo caso, le bastaron para seguir manteniendo el primer lugar de menciones espontáneas como figura presidencial.  Más atrás se ubicaron Michelle Bachelet (9%, -2pts), José Antonio Kast (7%, -2pts),  Johannes Kaiser (4%), Carolina Tohá (2%), Camila Vallejo (2%), Franco Parisi (1%) y Tomás Vodanovic (1%), mientras que el 48% (+10pts) aseguró no tener una preferencia para la presidencial.  

Por otro lado, Matthei sigue siendo la figura política con mejor evaluación y la segunda con mayor porcentaje de conocimiento, sólo detrás de la expresidenta Bachelet. Respecto a su valoración, el 63% afirmó tener una imagen positiva de la alcaldesa, mientras que el 30% sostuvo tener una percepción negativa. 

Razones de una abrupta caída

Durante las últimas semanas, al igual que el resto de la oposición, Matthei se ha visto obligada a responder por los nuevos antecedentes que han surgido respecto al Caso Audio que han evidenciado la relación de Luis Hermosilla con personeros clave del sector como lo son Andrés Chadwick —recientemente renunciado a la UDI—, Felipe Ward, ex ministro de Sebastián Piñera y militante gremialista o Manuel Guerra, exfiscal contratado por la municipalidad de Providencia. 

Para Ximena Orchard, investigadora y directora del Centro de Estudios de la Comunicación Pública (CECOMP), de la Universidad de Santiago, esto sería la principal razón del desplome de Matthei: “Dado el momento de aplicación de la encuesta, resulta lógico explicar la caída en las menciones espontáneas de voto hacia Evelyn Matthei a partir de su vinculación con el Caso Audios. Más allá de haber sido víctima de comentarios sexistas por parte del exfiscal Guerra en el chat que tenía con el abogado Luis Hermosilla, estas conversaciones también direccionaron la discusión pública hacia una aparente cercanía y afinidad política de Matthei con el cuestionado exfiscal. Es bastante probable que ese vínculo inhiba la expresión de apoyos hacia ella”. 

Opinión similar tiene Rodolfo Disy, académico de la UAI, quien además suma otro episodio que ha afectado al sector: el polémico sobresueldo de Marcela Cubillos. 

“Parte de la explicación tiene que ver con cierta fatiga natural que se genera cuando una persona se presenta como candidata por mucho tiempo. Sin embargo, la brusquedad apunta que hay causas más contingentes detrás. Por un lado, está la asociación de Matthei con la UDI, su partido, que ha estado involucrado en varios de estos casos (Audios) y más directamente la forma en que ella se ha referido, por ejemplo, al caso de Cubillos y la USS, lo pudo haber sido insatisfactorio o decepcionante para algunas personas”.

En dicha oportunidad, Matthei en primer lugar salió a defender a Cubillos aludiendo a que cantantes urbanos o futbolistas ganan igual o mayores salarios, pero que “nadie decía nada”. Sin embargo, sólo horas después, la alcaldesa debió salir a dar pié atrás y rectificó su declaración inicial señalando que Cubillos y la Universidad San Sebastián debían aclarar la situación. 

Respecto a las razones más de fondo que podrían responder a la caída de Matthei, Marcelo Santos, académico de la Universidad Diego Portales e investigador del Núcleo Milenio MEPOP, sostiene que “a medida que se va acercando la carrera presidencial comienza a exigir mayor responsabilidad en las respuestas de los candidatos”, situación que Matthei estaría resintiendo debido a la crisis de su sector. 

En ese sentido, Santos afirma: “Puede haber un efecto un poco retardado respecto a lo que ha sucedido con el caso Hermosilla, porque las encuestas van dando cuenta de ciertas situaciones después de los hitos” y añade que si bien Matthei “sigue siendo bien evaluada en su gestión, puede que haya habido una baja de confianza en lo que puede hacer la derecha a cargo del gobierno”.

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Otro indicador que llamó la atención en esta última entrega de Cadem fue el gran porcentaje de personas que afirmaron no tener una preferencia presidencial —48%—, siendo el mayor desde 2022. 

Sobre este fenómeno Santos indica que “el gran porcentaje de gente que no sabe por quién votar se debe a varios factores: primero que sigue distante la contienda presidencial; no hay campaña, no está claro quién va, quién no va, entonces todo es muy especulativo aún. Y por otra parte, el caso Hermosilla pone en cuestión toda la institucionalidad política y jurídica. Eso puede también contribuir para una desesperanza, una falta de interés, una desilusión con la política en general, y que hace con que las personas no estén muy involucradas con el proceso”. 

En esa línea, el investigador añade que “de ahí hacia votar nudo o votar blanco puede ser un paso esperable, creo que es posible que eso suceda”, aunque subraya que “queda mucho tiempo, hay más de un año aún de carrera hacia la próxima presidencial”. 

Orchard, en tanto, asevera que esta “es una carrera abierta, y todavía no es completamente claro quién podría capitalizar los efectos que tendrá el escándalo del caso audios sobre las intenciones de voto de las personas”, lo que se refleja en el amplio porcentaje de indecisos. 

“Tampoco hay que olvidar que sondeos de opinión como este tienen algo de política ficción: contribuyen a tantear nombres, a monitorear el estado de la opinión pública, pero lo hacen en base a candidatos que todavía no tienen existencia formal y podrían no llegar a tenerla. Un dato importante para no perder de vista es que más de un tercio de los encuestados declara no saber aún por quién votar”, sentencia.