Gracias a un stock de viviendas de entre 90 mil a 105 mil unidades, y con un pie de cuota sin intereses por casi 60 meses, el mercado inmobiliario comienza a sumergirse en una "ventana de oportunidades" atractivas para nuevos clientes.

Cristián Martínez, fundador de Crece Inmobiliario, es optimista en que el último trimestre del 2024 finalice con un volumen de ventas que supere considerablemente las cifras registradas durante los primeros meses del año.

Otro de los elementos que forman parte de esta fórmula son los descuentos "agresivos" y las promociones sin precedentes, sostiene Martínez.

Estos ofrecimientos responden a lo complejo que es para las inmobiliarias sostener un sobrestock indefinidamente.

Los costos de mantenimiento, los intereses bancarios y los gastos administrativos merman la posibilidad de mantener estos proyectos y por lo tanto, se transforman en una carga financiera, explica el experto.

Sin embargo, el panorama para un futuro no lejano será menos ventajoso para los inversionistas, ya que los permisos de edificación han disminuido.

Para 2025, la oferta será más limitada en relación al periodo actual, sumado a que el ingreso real de las personas avanza lentamente en contraste con el valor de los bienes inmuebles.

En consecuencia, es posible que el stock actual se liquide y las nuevas propiedades estén en venta a precios mucho más altos.

En ese sentido, el arriendo se convertirá en la opción que deberán tomar los inversionistas. Sin embargo, si existe la posibilidad de comprar, Martínez recomienda aprovecharla.

"Comprar ahora para en el futuro generar un flujo constante de ingresos arrendando el inmueble", sostiene.

Foto: Agencia Uno.