En medio de todas las contingencias que estamos viviendo en Chile durante las últimas semanas, la situación del senador de la UDI, Javier Macaya, derivada de la defensa de su padre, Eduardo Macaya, condenado por pederastia, es un tema que no deja de preocupar a algunos sectores del país, más todavía considerando que se trata de un senador de la República y un rostro relevante de Chile Vamos y la UDI.

En este contexto, para el feminismo, ¿qué implica que él siga en el Congreso?

Las interrogantes en este sentido son diversas, por lo que consultamos a Sindy Salazar, abogada de la Corporación de Abogadas Feministas (Corafem), quien tiene una postura clara ante la condición en que se encuentra el parlamentario como integrante del Poder Legislativo.

“La permanencia de Javier Macaya en el Senado, a pesar de los cuestionamientos relacionados sobre la conducta de su padre, plantea una preocupación no solo para nosotras, sino para la democracia en Chile”, dice en el inicio de su diálogo con El Desconcierto.  

Siguiendo con su análisis, Salazar comenta que lo sucedido, “nos recuerda que nuestra sociedad, aún permite que figuras públicas mantengan su poder sin un examen riguroso de sus acciones", a pesar de "la defensa de actos reprochables, ilícitos o delictivos", lo que se traduce en que "pueden influir en la percepción de la justicia y la equidad ante la ley".

Ciudadanía espera "un estándar mínimo ético"

"La ciudadanía espera que quienes legislan, lo hagan con un compromiso claro hacia los derechos humanos y un estándar mínimo ético", complementa.

De hecho, para la abogada "la permanencia de Macaya en el Congreso tras su defensa de estos delitos, envía una señal contradictoria y se vuelve un ejemplo más de impunidad desde un partido donde confluyen el poder político y económico de este país", como "es la UDI".

Siguiendo con su análisis, Salazar plantea que "la permanencia de Macaya en el Senado perpetúa la impunidad y vulnera los derechos de mujeres y niñas".

En qué situación está el senador de derecha ante un escenario en que le corresponda legislar temas de educación sexual y materias de protección de los derechos de la mujer en Chile, es otro tema que le planteamos a nuestra entrevistada, quien sincera sus reparos al respecto.

"Es evidente de legitimidad de Macaya para legislar en estos temas es cuestionable", asegura.

Y agrega que "no podemos permitir que una persona que por medios de comunicación expone y vulnera a víctimas de delitos solo porque es su padre el involucrado, que busca presionar a instituciones del Estado para influir en un juicio, o que vulnere directamente a las víctimas de delitos exponiéndolas, comentando, tenga voz en asuntos sensibles como educación sexual, protección de derechos de mujeres o derechos de niñas/os adolescentes".

Representa un "retroceso de derechos hacia las mujeres"

"Todo lo que ha hecho el senador no solo carece de correspondencia ética, sino que es derechamente una vulneración legal y constitucional. Me pregunto, ¿estamos dispuestos a seguir tolerando a senadores en Chile que se sienten por sobre la ley?", se cuestiona la abogada respecto de quien en la última encuesta Cadem aparece como una de las figuras políticas peor evaluadas (19%, -8pts).

Paralelamente, Salazar recalca que "los feminismos cuestionan figuras como Macaya porque a lo largo de la historia, lo que representa no solo es la relativización y retroceso de derechos hacia las mujeres, sino que además lo hace desde una posición de poder".

"Es decir, ahora tenemos un senador que vulnera derechos de niñas a vista y paciencia del país", agrega.

En consecuencia, insiste, "la indignación es evidente".

Finalmente, consultada sobre el sondeo mencionado, aseguras que "las encuestas tienden a ser reflejo de tendencias coyunturales, mas no podemos dejar de pensar que la violencia estructural que produce tener políticos normalizando todo tipo de violencia, defendiendo pederastas o ejerciendo violencia económica con los hijos/as es una cuestión que nos debería tener en alerta".

"Y hacernos enfrentar la necesidad de cuestionar nuestros estándares hacia quienes conducen y deciden la política del país", concluye.

Crédito foto: Agencia Uno