Un empleado de la empresa Codelco, División El Teniente, fue despedido el 7 de octubre de 2021 después de expresar su opinión durante una negociación de trabajo.

Este trabajador, que participaba activamente en el sindicato, criticó lo que el gerente general había propuesto en la negociación y, poco después, se encontró sin trabajo.

Él creyó que su despido fue porque habló, y decidió buscar justicia.

Llevó su caso al Juzgado de Letras del Trabajo de Rancagua, esperando que se reconociera que su despido no había sido justo.

El tribunal analizó todo lo sucedido y llegó a la conclusión de que el empleado había sido despedido solo por expresar su opinión y participar en actividades sindicales, algo que está protegido por la ley.

La decisión del tribunal fue clara: el despido fue injusto y el trabajador debía ser reintegrado a su puesto.

Además, la empresa debería pagarle todo el sueldo y los beneficios que no recibió desde el día que fue despedido hasta que volviera a trabajar.

Esto incluye su salario normal, bonos y cualquier otro beneficio que hubiera ganado si no hubiera sido despedido.

Además de ordenar que se le devuelva su trabajo y se le paguen sus salarios atrasados, el tribunal también decidió poner una multa a la empresa.

Esta multa de 60 Unidades Tributarias Mensuales (un tipo de medida económica que usa el gobierno para calcular multas y otros pagos) no irá a los bolsillos del trabajador, sino a un fondo especial que ayuda a formar a los sindicatos y mejorar las relaciones laborales en Chile.