Apoyo a aborto libre sube más de 20%: Estudio del CEP demuestra revelador cambio en 25 años
Luego de que el 1 de junio el Presidente Gabriel Boric anunciara el envío de un proyecto al Congreso para legalizar el aborto, un trabajo de investigación del Centro de Estudios Públicos (CEP) oficializado esta semana, evidenció el cambio de postura que ha experimentado nuestra sociedad frente a un tema que para algunos sectores del país no deja de ser controversial, al punto de generar un rechazo cerrado a una normativa que lo faculte.
"Los datos de muestran una alta legitimación social e institucionalización de la opción por las tres causales, un crecimiento de la opción por el aborto ‘en cualquier caso’, y un descenso de la alternativa que apunta a prohibir el aborto", detalla el trabajo de autoría de Aldo Mascareño y Ariadna Chuaqui.
Paralelamente, los responsables del análisis transparentan la existencia "una diferencia significativa entre la primera medición de 1999 y la que sigue, 15 años después".
De hecho, en función de la información recogida por el centro de estudios, se plantea "una disminución de más de 20 puntos porcentuales entre quienes consideran que el aborto siempre debe estar prohibido".
Desde entonces, "la opción intermedia (‘el aborto solo debe estar permitido en casos especiales’) se posiciona como aquella con mayor apoyo (en torno al 50%), con poca variación entre el 2014 y la última medición de 2023".
Tendencia cambia significativamente
"Adicionalmente, la reducción de la alternativa de prohibición del aborto alcanza en 2014 un porcentaje similar a la opción contraria (‘el aborto debe ser una opción para las mujeres en cualquier caso’): la primera obtiene 23%; la segunda 20%", complementa el análisis.
Según plantea el estudio, "la distancia entre estas últimas opciones se amplía levemente en 2017 (27% prohibición; 21% opción 'en cualquier caso')", para luego evidenciar un cambio relevante.
"Entre 2017 y 2022, luego de la legislación de las tres causales, estas tendencias se invierten. Por un lado, hay un aumento de 10% en quienes consideran que el aborto debe ser ‘una opción para las mujeres en cualquier caso’ y, por otro, una disminución de 9% en quienes consideran que el aborto debe estar siempre prohibido", complementa el reporte.
Y en el período 2022-2023, detalla el trabajo de investigación, "la prohibición del aborto es la opción con menor apoyo en Chile; y la que más apoyo concita es la de permitir el aborto ‘en casos especiales’ (53%), esto es, las tres causales".
"Cambio generacional"
¿Cómo se explican estas tendencias? Alejandro Olivares, director de Administración Pública de la Universidad Mayor entrega algunas apreciaciones para entender la evolución de la postura.
"Ha cambiado bastante, pero de forma lenta, lo cual da cuenta de un cambio generacional", dice aclarando que "lo que presenta el Centro de Estudios Públicos ahora es una serie de largo tiempo, 20 años".
De hecho, el profesional recalca que "si uno mira, pareciera un cambio abrupto, pero es lento y sistemático, son nuevas generaciones que están más disponibles a cuestionar algunos preceptos de las anteriores, y parece ser que que el aborto es parte importante de las nuevas generaciones que hoy están teniendo voz, parece ser un tema al cual están abiertas para que se discuta, se legisle o para que esté en la palestra pública".
"Además, porque el aborto en tres causales ha funcionado bien en general, con todas las limitantes que pueda haber. Por tanto, está la conciencia de que ya están esos derechos adquiridos y se puede seguir avanzando", complementa.
De hecho, plantea que contra todo lo que se ha dicho desde la disidencia, insistiendo en instalar la idea de que disponer de una normativa de interrupción del embarazo redundaría en una masificación de este, "se ha demostrado con el aborto en tres causales que no es así, que no hay corrida en masa para abortar porque sí".
"Van a existir desacoples"
Ese antecedente, asegura Olivares, "ayuda mucho a dar cuenta de que ha sido un proceso que ha estado acompañado de las nuevas generaciones, y que es gradual".
¿Qué señal le da a la población la oposición en el Congreso, cuando inmediatamente tras el anuncio presidencial sobre el proyecto, al menos 10 parlamentarios de derecha y extrema derecha se retiran de la sala indignados?, ¿hay desconexión con la ciudadanía? Para el experto se trata de "cosas muy distintas".
"Una es lo que la ciudadanía, a través de la evolución de una encuesta pueda ver respecto de un tema, y otro, lo que sus autoridades y legisladores ven sobre el tema. En este y en cualquier otro hay, pueden haber y van a existir desacoples entre lo que opina parte de la ciudadanía, la opinión pública y lo que puedan opinar las autoridades", recalca.
"No necesariamente quiere decir que aunque la opinión de la ciudadanía haya cambiado favorablemente, la de los legisladores (también). De hecho, mientras en nuestro Congreso estén electos democráticamente personas de la extrema derecha, del Partido Social Cristiano, los Republicanos, se oponen ante cualquier evento, de hecho quieren eliminar el aborto en tres causales".
Tanto así, que anticipa "un conflicto entre los poderes o entre Poder Legislativo y Ejecutivo, o entre la ciudadanía y el Legislativo".
Promotores deben agudizar contradicción
"Pero eso es como normal, lo que sí tendrían que hacer quienes promueven el aborto, es agudizar esta contradicción, decir: 'la ciudadanía dice A, ustedes están diciendo 'anti A'. Y en momento electoral, ese tipo de cosas reforzarlas para que la ciudadanía al votar, vote por personas que la representan más en estos temas".
Consultado luego respecto de qué tanto los parlamentarios son capaces de entender cuáles son las preocupaciones del ciudadano al que representan, Olivares asegura que no es tan evidente que deban responder a esa lógica. .
"Uno podría decir que esta en particular, no es una preocupación de diario. Es una preocupación bastante más nueva en la comunidad política, en opinión pública, de hecho a muchos les sorprende este resultado del CEP, porque parece contraintuitivo, entonces ellos podrían decir: 'a mí la ciudadanía me eligió sabiendo que estoy en contra de aborto', por tanto, voy a defender esa postura y voy a poder decir 'cuando me votaron yo dije no al aborto, y a mí me eligieron contra el aborto'".
"Este es el juego de la democracia, las preferencias cambian en el tiempo" y, mientras "las autoridades políticas dicen ser capaces de tener mecanismos para hacerse cargo de las diferencias en la ciudadanía, es importante (generar) medidas complementarias al Congreso, que permitirían que eventualmente en algún tipo de materias se puedan generar instancias en que se representen ante las autoridades", sostiene.
Apuntando luego a la estadística que certifica el cambio de postura frente al aborto, Olivares admite que "son relevantes, es un cambio sostenido en el tiempo y eso hace que tenga más fuerza".
"Hemos tenido un cambio en las generaciones, hoy son mayoritariamente representadas en la opinión pública, son un poco más progresistas que las anteriores y eso se nota en que han sido capaces de apoyar algunos procesos de transformación, lo que a lo mejor otras generaciones no hubieran hecho", agrega.
Por otra parte, insiste, "hay un aprendizaje de las tres causales, se da cuenta de que no hay un descontrol, hay una necesidad que debe ser cubierta y la ciudadanía está siendo capaz de entender que, responsablemente, esta es una opción válida".
"Y lo otro que también puede ser, es que efectivamente siempre se ha abortado y que, por lo tanto se está transparentando algo que ocurría bajo la alfombra", concluye.
Crédito foto: Agencia Uno