Es uno de los principales rostros de la renovación en la política chilena, además de uno de los “cercanos” al Presidente Gabriel Boric. Se trata del diputado de Convergencia Social (CS), Gonzalo Winter.

El parlamentario, quien junto a su colectividad son parte de Apruebo Dignidad, el bloque le otorga el sostén y capital político del mandatario, está alineado con el objetivo claro de cumplir a cabalidad el programa de la nueva administración.

En una entrevista que concedió a La Tercera, Winter asume el complejo escenario que tiene su sector para plasmar en la realidad y cumplir con la promesa efectuada a la ciudadanía. Además, reconoce que la Cuenta Pública revitalizó la confianza en el Presidente.

"Ponerse de acuerdo con la centroizquierda y aceptar las condiciones del terreno que hemos heredado, es parte de la posibilidad de que nuestro programa efectivamente se ejecute. Y con esto quiero ser muy claro: Apruebo Dignidad, y en particular el Frente Amplio, no es una coalición que pretenda erigirse como guardiana de la doctrina, ni de los símbolos de la izquierda, ni cambiar el mundo enunciando con radicalidad determinados eslóganes”.

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“Lo que nosotros queremos es que nuestro programa efectivamente se ejecute, ya sea en cuatro, en ocho o en 10 años", sostuvo tajantemente Winter.

Asimismo, el diputado de CS (mismo partido al que pertenece Boric) insistió que "dentro de la coalición, no veo realmente un problema con las expectativas, lo que sí hay que adaptar el programa a los tiempos que imprime la realidad".

"La mayoría de las reformas estructurales que propone el programa del Presidente Boric no son la ocurrencia de la última reunión del comité político, sino que vienen marcándose en los programas de la izquierda y la centroizquierda desde hace 10, 20 o 30 años. (...) Los anhelos de las fuerzas progresistas no se agotan por lo que pueda hacer un gobierno o su coalición en 1.500 días", argumentó.

Asimismo, Winter salió al paso de las declaraciones del titular de la Segpres, el ministro Giorgio Jackson, quien sostuvo que la implementación del programa del Ejecutivo dependerá de lo que suceda en el Plebiscito de salida.

"El gobierno del Presidente Boric va a gobernar el país hasta el 11 de marzo de 2026, pase lo que pase", dijo.

No obstante, el parlamentario reconoció que "hay algunas reformas que sí chocan con la actual Constitución. Hay otras reformas que se hacen, que son posibles, pero son más difíciles con la Constitución. Y hay otras que no deberían tener conflicto".