La situación que comenzó a vivir España esta semana a causa de la pandemia del coronavirus se transformó en realmente crítica luego que el gobierno hispano confirmara el fallecimiento de 738 personas este miércoles, aumentando a 3.434 los decesos en el país de la Península Ibérica.

Así, esta nación europea se transformó en el segundo en el mundo con más casos fatales a causa del COVID-19, superando a China (3.287) y quedando bajo Italia, la región más devastadas y que completa 6.820 muertes.

“Sanidad informa de que 47.610 personas se han contagiado, lo que supone un incremento del 20%, al sumarse en un día 7.937 nuevos infectados. Además, 3.166 personas están en la UCI. El Gobierno espera que a finales de semana se empiecen a notar los efectos del aislamiento”, aseguró el diario El País.

La cantidad de muertos que está acumulando España tiene a la ciudad de Madrid en una verdadera crisis sanitaria, debido a que colapsaron los servicios fúnebres, las morgues y los cementerios, haciendo que los plazos de inhumación se alarguen.

Es por eso que las autoridades de la capital española decidieron resguardar los cuerpos de los fallecidos en el hielo de pistas de patinaje con el fin de evitar al máximo el proceso de descomposición y no agregar más problemas a una atribulada ciudad.

“Ante la escasez de recursos para el depósito de cadáveres derivado de la situación generada, que implica un número importante de fallecimientos diarios, superior a los recursos de instalación disponibles en la ciudad de Madrid, se hace necesario disponer de instalaciones adicionales para poder gestionar el depósito y posterior traslado de cadáveres a destino final”, indicó Madrid Salud en un comunicado de prensa.

Por su parte, el ayuntamiento confirmó que “ante el aumento progresivo del número de fallecidos y la imposibilidad de las funerarias para poderlos enterrar en el plazo establecido, la empresa concesionaria del Palacio de Hielo ha cedido sus instalaciones para poder albergar estos cuerpos a la espera de que las funerarias puedan hacerse cargo de ellos”.

Sin duda, España e Italia están sufriendo las consecuencias de la irresponsabilidad de las personas que se demoraron en tomar medidas de resguardo para protegerse del coronavirus que está arrasando con ellos.