Mayol: "Kast es un buen candidato, eso es lo que él tiene, lo único que ha demostrado en la vida"
Un par de días después de la primera vuelta electoral del 16 de noviembre, el sociólogo Alberto Mayol conversó con El Desconcierto sobre los resultados que sorprendieron al mundo político. La subrepresentación de Franco Parisi en las encuestas, el desempeño de Johannes Kaiser, las posibilidades de Jeannette Jara en segunda vuelta y el fenómeno de 'candidatos mediáticos' electos al parlamento fueron algunos de los temas abordados en esta entrevista realizada en la redacción del medio.
"Lo primero: esta semana no sabes, por tanto tienes que investigar. Tienen que estar investigando ahora cualitativamente, sobre todo. El número es lo de después, pero lo primero es saber a dónde tienes que entrar, cuál es la puerta. Hoy día, esta semana, lo que te toca es romper el tablero, tratar de que se caiga el tablero de la mesa. Con eso no va a subir puntos, pero va a generar la posibilidad de romper un poco el tablero. La próxima semana ya implementas estrategias. Eso es lo que le queda, no tiene muchas alternativas", señaló el sociólogo sobre lo que enfrenta Jeannette Jara en este inicio del camino hacia la segunda vuelta.
El fenómeno Parisi y la polémica con las encuestas
- Franco Parisi te nombró específicamente por la subestimación en las encuestas, al igual que a Cadem y otras consultoras debido a la subrepresentación que le entregaban constantemente. ¿Por qué crees que ocurrió esta situación?
Lo primero que quiero decir es que lo que él hace, el ataque, es parte de una estrategia. Él no solamente dice que le subestimaron, que es cierto, o que le perjudicaron, que también es un hecho. Por supuesto, cuando no hay dolo y hay un trabajo bien hecho, voy a explicar por qué. Pero él habla de manipulación. ¿Por qué hace eso? Porque todo su discurso, todo su proyecto político está basado en la idea de que las élites le temen, cosa que hoy día es cierto, pero antes no lo era. Que las élites le temen y que lo persiguen. Entonces juega con esto de "me están manipulando las cosas para perjudicarme, sacarme. Soy el outsider, no soy el político de la política, estoy fuera y me están perjudicando".
El fenómeno yo creo que es muy interesante, y tiene todo el sentido sociológico, solo que las herramientas que tenemos es difícil que lo puedan vislumbrar. En el caso nuestro, nosotros siempre decimos que tenemos un riesgo muestral, que tenemos dificultades en el volumen de encuestas para hacer en el norte, que tiene una tasa de respuesta mucho más baja que el resto del país. Parisi tenía razón cuando decía que su público, su votante, no contestaba a las encuestas. Es verdad. Y no solo no contesta, sino que además en el norte no se contesta en general, no por el votante de él específicamente. El hombre del norte es muy difícil que conteste las encuestas.
- ¿Hay alguna explicación de ese fenómeno?
Hay un fenómeno de desinstitucionalización, donde la sensación es que todo el saber que puede acumular el resto respecto a ellos es irrelevante. Es un far west, hay que ir a ganarse la vida, hay que estar lo más cerca posible del chorro de dinero que es la minería. Son personas exitosas, el migrante es persona exitosa, sin reconocimiento político. Entonces hay un resentimiento político, cívico, muy fuerte. Portarse bien no tiene sentido. Eso, evidentemente, sabíamos que había una subrepresentación. Ahora, cuando te equivocas en una encuesta, te vas a equivocar con todo, porque el otro tiene que sumar cien. Entonces todo se va a cambiar, todo se va a mover.
El tema de fondo además es que lo que hemos visto desde la elección de la convención constitucional para adelante, no son solo las variables de voto, sino que en otras variables, pero que son de alto interés político, vemos un fenómeno de licuefacción total. No hablemos del líquido que se mueve, hablemos de un chorro súper potente de agua que se está moviendo, donde las elecciones pasan a ser muy estocásticas, porque a última hora eso se desenfrena.
El "nuevo mérito" y el peronismo sin Perón
- ¿A quién privilegió el voto obligatorio?
No sabemos si hay una correlación espuria. Una correlación espuria significa que yo, por ejemplo, puedo encontrar relaciones que no tienen causalidad. Nosotros vimos durante la convención constitucional que una variable que para nosotros es la mejor que hemos construido desde el año 2002, cuando creé esa pregunta, es sobre la legitimidad de la riqueza, básicamente si la riqueza viene del abuso o viene del mérito.
Esa pregunta en los tiempos pre-estallido siempre era 50-50. Llega el 2011, 56% abuso. Llega el 2014, 62%. Llega el 2015, queda 66%. En el caso de SQM, Penta, Caval, llega el estallido social y eso llega al 88% abuso. Llegamos al inicio de la convención, 88%. Ocho meses después de iniciar la convención, abuso ya no era, de 88 pasó a menos de 30. Se desploma en un segundo y sube radicalmente a 62% mérito, y desde entonces no se ha movido.
- ¿Por qué se genera ese cambio tan radical y por qué no se ha movido?
Parisi le está diciendo una cosa que formalmente sería de izquierda a sus votantes, que es que a ti no te tocan las mieles del proceso de modernización. Pero contrario a la izquierda, no va a decirte que eres una víctima. Va y te dice: tú eres un héroe, emprendedor. Eres un jugador que juega en la cancha que te pongan. Estás fuera de la cancha. Es una cancha de piedra, una cancha donde siempre hace calor, donde se juega sin claridad cuáles son los límites. En esa cancha juegas tú. Y tú tienes que ir para adelante, porque tienes que ser rico.
La palabra mérito significaba algo que ya no significa. Nosotros tenemos el concepto del mérito radical de los años 50, básicamente. Ese era el mérito. De pronto, vienen grandes terremotos, cuando llegan los Chicago Boys. Ahora, Parisi viene a ofrecer un nuevo tipo de mérito y ese mérito no tiene nada que ver con lo anterior. Es una relación no con la institucionalidad. No sabemos qué significa todavía, porque está diciendo lo que no es. Nunca ha dicho nada que es. Solo ha dicho lo que no es.
Nosotros ahora estamos en una situación similar al fin de los años 30 en Argentina. Estamos justo antes de Perón, pero Parisi no alcanza a ser Perón porque no trae una solución. Trae un espíritu de época que tiene mucho que ver con el peronismo, que no es un proyecto político propiamente tal, sino que es una especie de aire que respiras.
La búsqueda del voto parisista
- ¿Cómo ves las posibilidades de Jara y Kast de rescatar el voto de Parisi?
Yo creo que lo normal es que pase lo mismo que pasó la vez pasada, que más de la mitad se va a ir a la izquierda. No creo que Parisi vaya a jugársela porque sabe que pone en juego sus capacidades. Tiene que parecer que él controla ese electorado. Cuando él lo niega, está diciendo que sí lo controla porque está abriendo una negociación. Nosotros estamos hablando de dos millones y medio de votantes. Él no es un profeta, todavía.
La presidencia de Kast y el nuevo escenario global
- ¿Cómo visualizas una presidencia de José Antonio Kast en estas condiciones?
Claramente la llegada de Kast establece una red de vinculación muy fuerte con el aparato norteamericano, que es una relación compleja. Al siguiente gobierno le va a tocar algo que se acabó para Chile: Chile aprendió a jugar muy bien, quizás el mejor del mundo, en un sistema internacional que tenía un perímetro muy marcado. Chile era un país táctico. Desde hace varios años viene siendo necesario que Chile necesita pasar a ser un país estratégico, que establezca cómo se relaciona con un mundo donde las fronteras no están claras.
América Latina hoy día es un lugar que necesita también esa estrategia. Chile ya no puede decir que no tiene los problemas de América Latina. Los tiene, los que son más pequeños, pero los tiene. Chile va a tener que pensar una estrategia, ojalá con América Latina, pensando en cuál es su estructura de relaciones con Europa, con África, porque África viene con un nuevo ciclo con dominio ruso-chino, y obviamente con Estados Unidos.
El caso Kaiser
- Johannes Kaiser esperaba pasar al balotaje. ¿Qué pasó?
Yo creo que tenía el porcentaje, que lo tenía. Estoy seguro que pasa a segunda vuelta si no lo perdía. No tengo ninguna duda de que él lo perdió. No fue solo el azar, no fue solo esta cosa circulante que andaba dando vueltas, sino que él se equivocó.
Él no entendió que un porcentaje grande de su votación no era la ultraderecha, que él había crecido con otra votación, que después la ultraderecha la había ido capturando. Él compartía, junto con Parisi, un rol apocalíptico. Kaiser era el mejor apocalíptico. Su jugada Krassnoff más tercera estrofa del himno nacional fue catastrófica para ese mundo que lo que está hablando es del colapso, que tiene una cosa mucho más mesiánica. Ese mundo se sentía cómodo con el Kaiser que no era súper facho. Pero cuando empezó a comerse a Kast, se tentó.
Kaiser fue la clave de la distribución. Distribuyó a su propia baja para Parisi, distribuyó a favor de Kast a última hora, porque su crecimiento hizo que los votantes de Matthei dijeran "no, si sale Kaiser es peor, mejor me voy con Kast". Y entonces perjudicó finalmente a Matthei, benefició a Parisi y benefició a Kast.
Las posibilidades de Jara
- ¿En qué rango ves las posibilidades de Jeannette Jara, y cuál sería el camino más adecuado para ella de cara a la segunda vuelta?
Lo primero: esta semana no sabes, por tanto tienes que investigar. Tienen que estar investigando ahora cualitativamente, sobre todo. El número es lo de después, pero lo primero es saber a dónde tienes que entrar, cuál es la puerta. Hoy día, esta semana, lo que te toca es romper el tablero, tratar de que se caiga el tablero de la mesa. Con eso no va a subir puntos, pero va a generar la posibilidad de romper un poco el tablero. La próxima semana ya implementas estrategias. Eso es lo que le queda, no tiene muchas alternativas.
- Darío Quiroga, cercano a ti, decía que la fortaleza es que José Antonio Kast es un mal candidato. ¿Esas perspectivas son suficientes?
Darío no me hace caso, pero nada (risas). No es un mal candidato, lo que pasa es que no es el candidato prototípico, carismático. Pero lo único que ha demostrado en la vida es que es un buen candidato. ¿Qué más ha sido? ¿Fue un buen diputado? ¿Fue un buen empresario? Nada de eso. Es un buen candidato, eso es lo que él tiene. Es un candidato para Chile, es un candidato para un país donde se puede votar por Eduardo Frei Ruiz-Tagle.
Él tiene todo súper diseñado, lo tiene súper trabajado, tiene todo el ecosistema alrededor trabajado. Esa campaña es muy gringa, súper bien trabajada, súper profesional.
- ¿Qué circunstancias tendrían que pasar para que Kast tambaleara?
Tienes que meter una cuña que lo obligue a responder. No está obligado a responder y no quiere responder. Si se sale del campo semántico te dio una oportunidad. Pero esto depende del ecosistema, la sociedad es lo que hay, y el 62% de la gente considera que la riqueza viene del mérito. Es un momento de derecha y va a seguir siendo un momento de derecha, puede ser de derecha más populista, menos populista, pero va a ser en ese espacio.
- ¿Qué tiene que hacer Jara, hacer un cambio radical en su equipo de campaña?
Sola, sola, sola. Es un cambio discursivo y fundamentalmente arriesgar. No salir a jugar el partido de la seguridad. Nunca salir a jugar el partido donde Kast te golea y cuando lo haces increíble pierdes 1-0.
El nuevo Congreso
- Hay un fenómeno de parlamentarios con mucha vinculación mediática: Pamela Giles, Ciccardini y Manoucheri, la Capitana Rodríguez, Doctor File, la "bancada Sin Filtros". ¿Qué lectura haces?
Más que el congreso, lo interesante es esta dinámica que tiene que ver con la desinstitucionalización. Cuando se desinstitucionaliza un país, los puntos de referencia ya no son las instituciones, sino que son las personas.
Hace nada era una especie de norma interna de los canales que no había ningún candidato a senador o diputado que pudiera estar de panelista estable si no estaba la competencia. Hoy día a nadie le importa eso, porque los puntos de referencia ya son las personas, y no los criterios.
Vamos a llegar al máximo de distancia a Oxford en este congreso, sin duda. Considerando una escala donde Oxford es lo ideal, estaremos a la distancia máxima.